1.- Para conocer la interioridad de una realidad hay que examinar su esencia. De igual manera, para formarse un juicio certero sobre un fenómeno es necesario examinar su causa generadora, lo que motiva su materialidad.
2.- Para hablar con relación a la presencia de los nacionales haitianos trabajando en diferentes áreas de la economía nacional dominicana, es preciso saber que el haitiano labora aquí como inmigrante por el desarrollo desigual que existe entre la República Dominicana y Haití.
3.- Para escribir la obra: Inmigración, haitianos y esclavitud, compartí durante varios meses en su centro de trabajo con los haitianos que llegaban al país a laborar en los centrales azucareros del Consejo Estatal del Azúcar- CEA-.
4.- Para fortalecer el contenido del citado libro, me dispuse y logré obtener documentos auténticos, mediante los cuales comprobé que la llegada al país de los inmigrantes haitianos se efectuaba en virtud de una operación de compra y venta de braceros del gobierno del vecino país al nuestro.
5.- Convivir con los braceros haitianos encargados de realizar trabajos en el corte y tiro de la caña, me dio base para exponer en el aludido texto, que los haitianos llegaban al país adquiridos por el CEA, como esclavos de nuevo tipo.
6.- Los nacionales haitianos presentes en los bateyes llevaron a cabo los trabajos en la más cruel explotación, además de que eran víctimas de robo en el pesaje de la caña.
7.- Miles de haitianos que venían aquí a trabajar por una sola zafra en un determinado ingenio azucarero estatal, permanecieron de manera indefinida, llegando a formar familias e integrarse a la sociedad dominicana.
8.- Esos braceros que vinieron desde su lar nativo a vender su fuerza de trabajo, en su oportunidad a los ingenios del Estado, son los ascendientes de muchos de los atletas dominicanos que llevan sangre haitiana.
9.- Hoy, luego de haber transcurrido muchos años, los descendientes de aquellos que trabajaron soportando agua, sol, sereno, viviendo en barracones y como esclavos, ahora con orgullo nos representan en las más variadas disciplinas deportivas.
10.- Conociendo la estirpe de los jóvenes que han puesto a su país en lo más alto en actividades deportivas, hace posible valorarlos por la superación que ellos mismos representan y lo que fue la vida amarga de su origen familiar.
11.- Por prejuicios de todas clases de los grupos dominantes dominicanos, no se ha escrito lo que es la historia, de dónde provienen los de ascendencia haitiana que en los más grandes escenarios deportivos ponen en lo más alto a su patria.
12.- Si se hiciera del conocimiento el historial de lo que ha sido la opresión que han sufrido aquí los haitianos inmigrantes, nos compenetramos y admiramos a los que llevan sangre haitiana, y ponen a sus compatriotas a sentirse ser distinguidos.
13.- De piel negra, de ascendencia haitiana y dominicano que engrandece a su país, es un ser humano excepcional y meritorio, llamado a ser colocado como ejemplo, modelo de quien merece ser admirado.
14.- La miseria que trae vicios y degradación ética y moral, lleva a muchos jóvenes nuestros a convertirse en antisociales, pero esa juventud que tiene como sus antepasados a haitianos inmigrantes, y sobresalen en los deportes, con su correcto proceder contribuyen a enderezar a sus connacionales.
15.- El éxito, los triunfos que alcanzan los compatriotas de ascendencia haitiana, son logros que deben servir como inspiración para la presente y futura generación de dominicanas y dominicanos. Ellos han de ser guía para los que en el porvenir serán mujeres y hombres ilustres.
16.- Conocer el origen de los atletas de ascendencia haitiana, que en escenarios extranjeros nos representan dignamente, sirve como motivo para desearles que sigan como hasta ahora, siendo símbolo de patriotismo y gallardía.