Una vez se asume el poder, las autoridades electas tienen la responsabilidad de estudiar, debatir, negociar, pactar y legislar en torno a la multitud de asuntos que le atañen como representantes de los asuntos públicos y que respondan a las necesidades de la comunidad política en general y no tan solo a los intereses inmediatos de sus partidarios.  Esto ultimo reviste una importancia capital toda vez que se entiende que la agenda publica no es solamente cuestión de legislar a favor o en contra del matrimonio gay, el aborto, la inmigración ilegal, la delincuencia común en las calles (no necesariamente los crímenes de cuello blanco) la censura de ciertos libros en las escuelas públicas, oposición al aumento de impuestos o que se elijan jueces conservadores a la Suprema Corte de Justicia.

Lamentablemente, estas simples verdades introductorias en lo concerniente a políticas públicas; no parecen ser parte del programa u agenda programática en varios legisladores republicanos de los Estados Unidos hoy, empecinados en mantenerse a rajatablas adheridos a su cerrazón e intolerancia aun a costa del interés nacional.

Un ejemplo de dicha actitud la encontramos luego del estallido de la guerra en Ucrania. La administración Biden propuso flexibilizar las restricciones en el visado a ciudadanos rusos con títulos profesionales avanzados en áreas de la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM en Ingles). Con dicha medida, EE. UU. se enriquecería con el capital humano de miles de jóvenes altamente capacitados en desmedro de la Rusia beligerante. De igual forma, la medida habría de beneficiar a miles de jóvenes altamente capacitados de Hong Kong quienes huyen de la continua represión China que padecen en Hong Kong.

En el 2020, un proyecto de ley encabezado por los representantes Tom Malinowski (Demócrata por New Jersey) y Adam Kinzinger (Republicano por Illinois) fue engavetado tras no contar con el apoyo necesario en los congresistas republicanos.    El controversial Marco Rubio se opuso al proyecto ya que, a su juicio, el aceptar a ciudadanos de Hong Kong sería el primer paso hacia la apertura indiscriminada de la frontera y porque además, China explotaría tal resquicio para enviar espías a suelo norteamericano. Otro republicano de gran peso como lo es Charles E. Grassley (Iowa) también se ha opuesto alegando que dicho proyecto de ley es altamente partidista y que no tenia nada que ver con contrarrestar a China. Mientras tanto, la inacción republicana le está costando a Estados Unidos miles de jóvenes altamente calificados que ahora están siendo absorbidos por países como Canadá, Turquía Georgia y otras naciones bálticas.

Pero todavía hay más; las fuerzas armadas de los Estados Unidos están experimentando un déficit de jóvenes reclutas en sus filas. Situación que afecta el nivel de preparación ante una guerra lo cual es a todas luces una amenaza a la seguridad nacional estadounidense. Las fuerzas armadas norteamericanas, por ejemplo, no lograron satisfacer la cuota requerida de reclutamiento en el 2021. El ejército, por ejemplo; estaba ofreciendo hasta 50 mil dólares a jóvenes para que se alistaran en sus filas y duraran un tour de al menos 6 años y aun con el incentivo no lograron la cuota requerida de reclutas.

  1. UU. experimenta en la actualidad un exiguo crecimiento poblacional. La calidad de los jóvenes que se decide enrolar dista mucho que decir. Hasta un 71 % de los aspirantes a ingreso son rechazados por no llenar los requisitos mínimos.  Si no es el sobrepeso, los mismos no reúnen los requerimientos académicos; cuentan con un historial de trastorno mental, historial delictivo o historia de abuso de drogas.

Todo lo anteriormente expuesto pudiese fácilmente resolverse si la nación contara con un efectivo sistema de regularización de la inmigración. En la actualidad, un 13.5% de la población estadounidense nació en el extranjero, pero, menos de un 4% de dicha población están en las fuerzas castrenses. Para ingresar a las mismas, se requiere la tarjeta verde (Green Card) y para conseguirla, el proceso puede durar hasta mas de una década.  En la actualidad existen más de medio millón de DREAMERS, estos son los jóvenes que fueron traídos cuando bebes a los Estados Unidos que todavía se encuentran en un limbo legal gracias a la negativa republicana que se opone ferozmente a que a los mismos se les conceda residencia permanente.

El representante Steve King (republicano de Iowa) vocero de la lucha en el congreso en contra de una reforma migratoria comprensiva ha continuado empujando la agenda republicana racista y antiinmigrante al proferir con relación a los DREAMERS “por cada uno de ellos que es graduado con las mejores calificaciones, existen 100 mas que pesan 130 libras y tienen pantorrillas del tamaño de un melón por estar transportando paquetes de 75 libras de Marijuana al través del desierto”

No cabe duda de que las anti políticas republicanas, el lenguaje de la cerrazón hacia el diálogo y la negociación que les caracteriza tarde o temprano pasarán factura a Norteamérica de no producirse un despertar en la conciencia entre los millones de votantes republicanos todavía hipnotizados con la retórica de miedo y odio que hoy prevalece en el discurso público que enarbolan.