"Que la victoria nos encuentre trabajando", fue el canto de victoria del presidente del PRM, José Ignacio Paliza, entonado la noche del 19 de mayo cuando la reelección del presidente Abinader se encontraba claramente establecida. Procedía a presentar al reelecto presidente, quien, antes que todo, felicitó a los otros participantes de la contienda, agradeció sus llamadas y encomió la tranquilidad y transparencia de todo el proceso.

Un proceso electoral que nos ha permitido apreciar todo lo que realmente ha cambiado nuestra institucionalidad y cómo, al cambiar, ha redimensionado la forma en la cual los ciudadanos ven su relación con la política. Definitivamente, han quedado atrás los procesos accidentados, las alteraciones, los confrontamientos y los cuestionamientos que durante tantos años plagaron nuestro quehacer democrático. El largo camino iniciado hace ya 58 años ha llegado a la cima, y podemos decir con total certeza que, como sociedad política, hemos madurado.

Pero no podemos descansar en esta madurez. Es nuestro deber aprovechar este enorme voto de confianza que la población dominicana nos ha brindado para continuar trabajando por la transparencia, la institucionalidad y la justicia. El camino del cambio que el presidente Abinader prometió ha quedado cimentado en este proceso, aumentando aún más el nivel de compromiso con el cual debemos abocarnos a trabajar.

Estos próximos cuatro años representan no solo el legado del presidente Abinader, sino la solidificación de todo un modelo de hacer política que permee a toda la sociedad. Un modelo que requiere que continuemos trabajando por la institucionalidad, la generación de trabajos dignos y la búsqueda de prosperidad, principios estos que orgullosamente enarbolamos como estandartes del buen quehacer político.

Así mismo, aumenta el compromiso de trabajar con ahínco y sin descanso para que pueda continuar aumentando la calidad de vida de todos los dominicanos. Solo trabajando sin descanso podemos garantizar que el día de mañana la República Dominicana sea un poco mejor de lo que es hoy.

Es por esto que las palabras de Paliza toman tanto peso y valor hoy, tal vez más que en otro momento. Hemos ganado como sociedad, como proyecto político y como República. Esta victoria, que es de todos los dominicanos, debe encontrarnos trabajando arduamente y sin descanso en la construcción de un mejor mañana, porque, sin lugar a duda, lo mejor está por venir.