“La soledad no existe.

No estás sola/solo,

es la falta de conexión contigo,

es la falta de sueños y proyectos”. Lucas Malaisi)

 

(Original de Lucas Malaisi, psicólogo emocional, Argentina. Modificado con la inclusión MDM)

Disponible en: https://www.facebook.com/fundacioneducacionemocional/photos/a.1962037057188330/5047988565259815/

Por circunstancias y vivencias personales, en estos 5 años he repetido situaciones de duelo. Con cierta frecuencia algunas personas me preguntan que si estoy sola en mi morada y cómo si fuese una dificultad. La verdad que es natural en mi forma de ser y de vivir el no sentirme sola. Y en ese sentido quisiera que muchas personas no tuviesen el sentimiento de soledad.

Y me pregunto, ¿qué se puede hacer para que no se tenga el sentimiento de soledad?

Lo primero es que podemos sentir amor incondicional y absoluto hacia una/uno mismo y hacia las/los demás y creo que puede aumentar, ante el duelo.

Las vivencias compartidas, las cualidades positivas de las personas que nos han acompañado en este espacio terrenal con su vestuario corporal son un capital emocional, social, que venimos llamando legado. Recordar, mantener actitudes, pensamientos, acciones… positivas, amorosas, propósitos de vida comunes son compañía permanente.

Podemos disminuir la soledad si continuamos las relaciones, los compromisos, las reflexiones, la conciencia, la autoestima, la sinergia, el trabajo en equipo, seguir acompañadas/os de millares de amores, millares de manjares, millones de flores… según nos dice Anthony de Mello en su meditación número 5 del Libro Una llamada al amor: Conciencia, libertad y felicidad., España.

Disponible en: http://www.opuslibros.org/libros/Una%20llamada%20al%20amor/meditacion_1_5.htm .Unresumen de estas meditaciones en: https://acariciando.blogspot.com/2007/01/meditaciones-de-anthony-de-mello-para.html

La propuesta es una educación emocional fundamentada en la serenidad, la empatía, en tener proyectos de vida sociales, políticos, culturales, afectivos y actitudes de lealtad, de compromiso, con disciplina y lealtad a los valores de la solidaridad, la autonomía, la calidad de vida, la libertad, la suavidad, el accionar con esfuerzo…

En síntesis, como dice Lucas Malaisi, no se trata de soledad, sino de tener conexiones profundas con nosotras, nosotros con meditaciones, respiraciones, vida en grupo, comunidades, proyectos de vida, educación emocional.