El próximo 28 de enero se cumplen 61 años de la creación de la Confederación Autónoma de Sindicatos Cristianos (CASC), hoy sindical clasista; este año también cumplen 61 años de fundadas la Federación Dominicana de Ligas Agrarias Cristianos (FEDELAC), y el Instituto Nacional de formación Agraria y Sindical (INFAS

A principios del año 1962 un grupo de jóvenes trabajadores dominicanos se reunió el 28 de enero, para constituir la Confederación Autónoma de Sindicatos Cristianos (CASC). Entre sus fundadores estaban Henry Molina, José Gómez Cerda, Gabriel del Río, Jesús Caminero Morcelo, Porfirio Zarzuela, Jorge Cruz Reyes, Rafael Hidalgo, y otros.

Varios de ellos venían de la Juventud Obrera Católica (JOC). Dos de ellos venían de estar exiliados en la dictadura de Trujillo (Henry Molina y José Gómez Cerda), otros habían estado en la organización FOUPSA, como es el caso de Gabriel del Río y Jesús Caminero Morcelo. Gabriel del Río salió del seminario para integrarse al sindicalismo.

Henry Molina y yo regresamos al país a mediados de enero de 1962, junto con nosotros también llegó Emilio Máspero, como asesor del equipo. El 5 de febrero formamos en Santiago el Sindicato Autónomo de la Industria Farmacéutica (SADIF), primer sindicato afiliado estatutariamente a la CASC.

Inicialmente se formó un Equipo Nacional, donde estaban Jesús Caminero Morcelo, Gabriel del Río, Porfirio Zarzuela, Jorge Cruz Reyes, Prisco Morales, Henry Molina, Rafael Hidalgo, José Gómez Cerda, y otros.

El equipo de jóvenes que formaron la CASC no tenía ningún vínculo con el pasado de la dictadura trujillista, tenían una formación social, ideológica y técnica muy superior a los otros sectores sindicales.

El primer mensaje de la CASC fue hacer un sindicalismo AUTÓNOMO E INDEPENDIENTE, frente a los gobiernos, patronos y partidos políticos; dirigido y autogobernado por los propios trabajadores. Otra característica de la CASC era la juventud. Del Equipo Nacional el mayor era Jesús Caminero, que tenía 25 años, el resto tenía un promedio de 22 años de edad.

La CASC desde su principio expuso claramente su ideología, basada en el humanismo integral y la Doctrina Social Cristiana, donde la Persona Humana tiene primacía sobre todas las cosas materiales; la supremacía de lo espiritual sobre lo material; del trabajo sobre el capital, buscando el Bien Común, por medio de la Justicia Social.

En abril de 1965 se produjo una revuelta cívico-militar que derrocó al Gobierno de facto que dirigía Donald Read Cabral. La CASC se opuso a la intervención norteamericana, desde cuando se inició esa revuelta popular. Se constituyó el Comando Armado Sindical Cristiano (CASC), y el Secretario General Henry Molina, pasó a ser Comandante. Todos los miembros del Comité Ejecutivo de la CASC se presentaron en la Televisión oficial, y por medio del vocero oficial, que era Henry Molina, respaldaron el Movimiento Constitucionalista.

La primera delegación internacional que llegó al país estaba encabezada por el Embajador de Chile ante las Naciones Unidas, Alejandro Magnet, periodista y diplomático, quién se reunió con los dirigentes de la CASC y con el coronel Francisco A. Caamaño.  Alejandro Magnet se quedó sorprendido que la CASC estuviera en apoyo al movimiento Constitucional, pues en los Estados Unidos se decía que ese era un movimiento comunista. De ahí surgió la idea de que un dirigente de la CASC fuera al exterior para expresar sus ideas.

José Gómez Cerda fue designado representante del Gobierno Constitucional ante los gobiernos de Venezuela, Chile y México, además estuvo en Nueva York, Washington y Puerto Rico, exponiendo la posición de la CASC.

En Venezuela se reunió con el presidente Raúl Leoni, además con dirigentes sindicales del Frente de Trabajadores Copeyanos, y la Confederación de Sindicatos Autónomos (CODESA)

En Chile se hizo una gran concentración en el Teatro Caopolicán, encabezada por José Gómez Cerda, quien luego se entrevistó con el presidente Eduardo Frei Montalva. El Gobierno y el pueblo chileno fue muy solidarios en favor del movimiento constitucionalista y contra la intervención norteamericana. José Gómez Cerda hizo contactos con dirigentes de Acción Sindical de Chile (ASICH), que había fundado el padre Alberto Hurtado.

En Puerto Rico me reuní con el Profesor Juan Bosch, Además, con el Frente de Trabajadores Puertorriqueños (FTP).  En México realice reuniones con el Frente Autentico de Trabajadores (FAT), y la Federación Latinoamericana de Campesinos (FLC), que tenía su sede para América Latina, en México.

La CASC se instaló en la " Zona Constitucional", en Ciudad Nueva, donde continuó su trabajo sindical, inclusive se organizó un CONSEJO NACIONAL, y se mantenía un programa radial " Justicia Social".

En la actualidad, la CASC es una de las pocas organizaciones sociales, políticas y culturales que pueden conmemorar 61 años de existencia. Me siento orgulloso de haber ocupado cargos importantes en la CASC,  como son; Secretario General, Secretario general adjunto, secretario de organización, director del Instituto Nacional de Formación Agraria y sindical (INFAS), fundador y asesor de la Federación dominicana de Ligas Agrarias Cristianas (FEDELAC), director del periódico y revista Revolución Obrera, en fin; ser un militante sindical, y haber compartido la dirección de la CASC con Henry Molina, Jesús Caminero Morcelo, Fernando Guante García y Gabriel del Río.