El senador demócrata estadounidense Richard Blumenthal y el republicano Lindsey Graham presentaron este jueves un proyecto de ley que amenaza con cortar lazos con los países que reconozcan la eventual anexión por parte de Moscú de los territorios prorrusos ucranianos que han sometido ese paso a referendos ilegales.

El presidente estadounidense, Joe Biden, ha advertido de que esa anexión sería ilegal, pero se necesitan más que palabras para responder al respecto, dijeron ambos legisladores en una rueda de prensa conjunta.

"Si te posicionas junto al presidente ruso, Vladímir Putin, al reconocer la anexión ilegal de partes de Ucrania, perderás todo el apoyo de Estados Unidos, que hará todo lo que esté en su poder para marginarte en el escenario internacional", sostuvo Graham.

Esos dos mismos senadores impulsaron a mediados de septiembre otro borrador de ley que busca reconocer a Rusia como Estado patrocinador del terrorismo, una etiqueta a la que se opone la Casa Blanca.

La nueva iniciativa bipartidista contempla la interrupción de la ayuda militar y económica de EE.UU. a quienes respalden las anexiones.

"A medida que Putin se vuelve más provocador debemos levantar la cabeza, no bajarla", añadió Graham

Según los resultados difundidos el miércoles por la autoridades prorrusas con el 100 % de la papeletas escrutadas, apoyó la anexión a Rusia entre el 87,05 y el 99,23 % de los votantes en los denominados referendos en los territorios controlados por las fuerzas rusas en el este y sur de Ucrania: Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón.

El Kremlin anunció este jueves que mañana, viernes, tendrá lugar la firma por parte de Putin de los tratados de anexión de esos cuatro territorios, que suponen en torno al 15 % del territorio de Ucrania o unos 100.000 kilómetros cuadrados, un tamaño similar al de países como Hungría y Portugal.

"Proseguiremos nuestros esfuerzos para que los países que fracasan en su respaldo a la ley internacional en la lucha por la libertad y la independencia de Ucrania rindan cuentas", recalcó Blumenthal.

De aquí a enero, los dos senadores se han propuesto además como objetivo llevar a cabo el cambio legislativo necesario para permitir a investigadores de la Corte Penal Internacional acudir a EE.UU. para recabar las pruebas que dicen que se tienen sobre los presuntos crímenes de guerra perpetrados por las fuerzas rusas en Ucrania.

La legislación federal estadounidense solo autoriza enjuiciar casos con estadounidenses involucrados.

Blumenthal y Graham también afirmaron que el Ejército ruso "pagará un precio" si ejecuta "los crímenes de guerra dictados por Putin", y señalaron que una resolución de continuidad que debe aprobarse esta semana para evitar un cierre del Gobierno estadounidense contempla 11.700 millones de dólares en ayuda a Ucrania.

"A medida que Putin se vuelve más provocador debemos levantar la cabeza, no bajarla", añadió Graham, para quien si el mandatario ruso llegara a cumplir su amenaza de recurrir al armamento nuclear en Ucrania debería considerarse un ataque contra la OTAN, porque la radiación no se limitaría a ese país, sino que llegaría a otros que forman parte de la alianza militar.