Dos autobuses con un centenar de migrantes fletados por el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, llegaron este jueves a la residencia oficial de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris.

La cadena de televisión Fox News precisó que los autobuses recogieron a los migrantes en Eagle Pass, en Texas, y llegaron a las proximidades del Observatorio Naval, donde se ubica la residencia de la vicepresidenta, en Washington DC.

Según Fox, el grupo de migrantes incluye a personas de Venezuela, Uruguay, Colombia y México.

En las inmediaciones de la residencia de Harris se encontraba Marisela Castillo Apitz, directora de la ONG Humanitarian Action, que opera en Washington DC y que atiende a migrantes.

En declaraciones a Efe, Castillo Apitz explicó que estaban esperando a los migrantes en las proximidades de la estación de trenes de la capital estadounidense, Union Station, a donde han estado llegando autobuses fletados por Texas con indocumentados en los últimos meses.

"De pronto nos avisaron que estaban aquí, fuera de la casa de la vicepresidenta, muy raro. Ellos dijeron que se sintieron engañados, esas fueron sus palabras, se sintieron parte de un show político. En total eran 101 migrantes, en su mayoría venezolanos", apuntó.

Castillo Apitz afirmó que los migrantes se quedaron "desconcertados y perdidos en estas calles": "Desde Texas les dijeron que los iban a llevar a una estación de autobuses, de pronto los dejaron en estas calles y se dieron cuenta que era mentira, que eran parte de un show político", dijo.

La activista indicó que su organización acompaña a los migrantes a iglesias y refugios temporales.

"El problema es que la mayoría de ellos no tiene a nadie acá, entonces se encuentran aún más vulnerables, porque no saben a dónde dirigirse -lamentó-. Ahora deben empezar su vida desde cero”.

La llegada de estos dos autobuses a la capital de EE.UU. coincide con el envío de medio centenar de migrantes, sobre todo venezolanos, a la exclusiva isla de Martha’s Vineyard, en Massachusetts, tras haber sido trasladados en avión desde Texas y Florida.

Los migrantes, entre los que hay también algunos colombianos, llegaron en dos aviones que aterrizaron inesperadamente en el aeropuerto de Martha’s Vineyard, lo que obligó a los responsables de gestión de emergencias de esta isla del nordeste de EE.UU. a movilizarse para darles atención sanitaria, alojamiento y comida, precisó The Vineyard Gazette.

En un video enviado a la cadena Fox, el gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, se atribuyó el mérito de enviar a los migrantes a la isla, apuntó por su lado el Martha’s Vineyard Times.

En 2021, DeSantis prometió gastar 8 millones de dólares para enviar inmigrantes fuera de su estado y mencionaba a Martha’s Vineyard como un posible destino.

En abril pasado Abbott anunció su intención de mandar a indocumentados a Washington DC, en respuesta a la decisión del Gobierno del presidente Joe Biden de rescindir una normativa sanitaria que permitía expulsarlos por la pandemia, que no llegó a ponerse en marcha por el bloqueo de los tribunales.

Más tarde, en mayo, el gobernador de Arizona, el también republicano Doug Ducey, emuló la medida y comenzó a mandar autobuses con migrantes a la capital.

A principios de agosto, los autobuses con migrantes comenzaron a llegar a la ciudad de Nueva York y este mes a Chicago.

Denuncian cómo operación electoral envío migrantes

Representantes de organizaciones sociales denunciaron este jueves que el envío a Massachusetts (norte de EE.UU.) de dos aviones con inmigrantes indocumentados responde a los intereses electorales del gobernador del estado sureño, el republicano Ron DeSantis.

La venezolana Yaneth Galvis, integrante de la organización Florida Immigrant Coalition, dijo en una conferencia de prensa que DeSantis ha utilizado a los inmigrantes "como fichas políticas" en su plan para renovar su mandato como gobernador de Florida en las elecciones de noviembre.

Galvis participó, junto a miembros de representantes de organizaciones que defienden los derechos de los inmigrantes, en una conferencia de prensa en la que se resaltó que DeSantis no respeta a los refugiados y recién llegados, no mira por los intereses de la economía y solamente busca su interés electoral.

"Debería —DeSantis— mejorar las condiciones de los centros de detención en vez de llevar a cabo acciones como esta", denunció.

La directora de Campañas Florida Inmigrant Coalition, la colombiana Paula Muñoz, dijo a Efe que el gobernador de Florida "ha estado construyendo su carrera política con este asunto y criminalizando a los inmigrantes indocumentados".

"Creemos que el envío a la isla Martha’s Vineyard de dos aviones con inmigrantes indocumentados lo llevó a cabo DeSantis en coordinación con otros gobernadores republicanos", subrayó.

La coordinadora de campañas del American Friends Service Committee, la argentina María Bilbao, señaló a Efe que el envío de los inmigrantes se trató de un "’show' político para agitar las bases más radicales del Partido Republicano en Florida".

Bilbao, miembro de esta organización que promueve un mundo más igualitario y sin violencia, dijo que "puede tratarse de "una iniciativa que DeSantis puso en marcha con el gobernador de Texas", en referencia a Greg Abbott, aunque sin dar detalles.

La venezolana María Corina, de la organización American Busimess Immigration Coalition, dijo que DeSantis "ha 'traficado' a otro lugar del país a gente que viene —a Estados Unidos— a distanciarse de la dictadura de Venezuela".

"Para de DeSantis la política es lo primero y la economía lo último. Es un político repugnante", aseguró la representante de esta organización con orientación empresarial.

Los representantes de estas organizaciones, si embargo, no dieron detalles de los inmigrantes y se limitaron a señalar que serían unos 50 y de nacionalidad venezolana, sin citar fuente alguna.

No hay una cifra oficial de pasajeros de esos aviones llegados el miércoles a la isla. Pero, según medios de Martha’s Vineyard, se trata de alrededor de medio centenar y son en su mayoría venezolanos.