El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó este sábado su preocupación por la población civil en la escalada del conflicto entre Israel y los Territorios Palestinos y pidió "todos los esfuerzos diplomáticos para evitar una conflagración mayor".
Guterres, en un comunicado de su portavocía, quiso "condenar en los términos más fuertes el ataque de esta mañana de Hamás contra pueblos israelíes cerca de la Franja de Gaza y el centro de Israel, incluyendo el lanzamiento de miles de cohetes hacia centros de población israelíes".
El jefe de la ONU pidió "máxima contención", aunque sin dirigirla a ninguna parte concreta, e instó "a todos los esfuerzos diplomáticos para evitar una mayor conflagración".
"(…) la violencia no puede dar una solución al conflicto, y solo se puede conseguir la paz a través de una negociación que lleve a una solución de dos estados", agregó.
El diplomático hizo hincapié en el impacto sobre la población civil, aludiendo a los "numerosos" israelíes muertos, heridos, atacados y secuestrados en sus casas; expresó sus condolencias a las víctimas y sus familiares y pidió la liberación de las personas abducidas.
Por otro lado, mientras siguen los combates y tras los bombardeos de represalia israelíes, los fallecidos un balance provisional de más de 480 muertos (en Israel asciende a 250, y en Gaza a 232) y hay miles de heridos.