La Unidad de Casos Abiertos de la Policía del condado de Broward, en el sur de la Florida (EE.UU.), identificó este martes al que calificó como un "violador en serie" que actuó en la región a mediados de la década de 1980.
Se sabe que el llamado "violador de la funda de almohada" atacó a seis mujeres, pero se teme que fueron más las posibles víctimas de Robert Koehler, cuyo nombre se dio a conocer hoy.
La Oficina del Condado de Broward indicó en un comunicado que en junio de 1984 una mujer que vivía en un apartamento en Pompano Beach sufrió un ataque "cruel y violento" en su casa, donde fue "brutalmente violada a punta de cuchillo" por un hombre que irrumpió en su apartamento.
Este fue solo uno de los caso de este violador que "aterrorizó el sur de Florida", donde decenas de mujeres denunciaron haber sido víctimas de un hombre que seguía este mismo patrón de actuación, aunque hasta ahora solo está acusado de seis casos de agresión sexual.
La Unidad de Casos Abiertos empezó a atar cabos en 2019 cuando el sargento Kami Floyd comenzó a investigar miles de casos de agresión sexual de la década de 1980 y conectó varios casos similares.
En esas fechas, los fiscales del vecino condado de Miami-Dade anunciaron el arresto de Koehler por un delito sexual y Floyd pidió una muestra del ADN del sospechoso y los análisis demostraron que estaba relacionado con los casos de Broward.
Koehler está bajo custodia en Miami-Dade y próximamente será trasladado al condado de Broward para enfrentar los cargos en su contra.
"En al menos ocho ocasiones en 1984 y 1985, los detectives creen que Koehler se coló en casas en el condado de Broward a altas horas de la noche o en las primeras horas de la mañana a través de puertas abiertas y atacó a sus víctimas mientras dormían o se preparaban para ir a la cama", indicó la Policía en un comunicado.
El apodo de "violador de la funda de almohada" se debe a que a veces cubría de esta manera las cabezas de sus víctimas o la suya propia.
Según las autoridades, Koehler amenazaba a las mujeres con matarlas a ellas o a sus familiares antes de violarlas y robarlas y se convirtió en un caso muy mediático en la época, pero ante falta de pruebas quedó en el olvido hasta ahora.
La Policía ha pedido a la población que se ponga en contacto con ellos si creen que pudieron ser víctimas del acusado, pues temen que puede haber más víctimas que aún no han compartido sus historias.