La Justicia de Panamá está en "deuda" con el país y debe hacer su parte, afirmaron este jueves a EFE analistas y políticos después de que Estados Unidos prohibió la entrada al expresidente panameño Juan Carlos Varela (20014-2019) y a su familia por su vinculación en "importantes" actos de corrupción.

Varela se sumó así al expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014), y dos hijos de este, Ricardo Alberto y Luis Enrique, que tienen prohibido el ingreso a Estados Unidos desde enero pasado por la misma razón.

Los cuatro están implicados en el caso de los sobornos de Odebrecht en Panamá y deberán enfrentar, junto a una treintena de personas, un juicio por blanqueo de capitales que se espera que comience en agosto próximo tras un largo y accidentado proceso que comenzó en el 2015.

Los dos hijos de Martinelli pagaron cárcel por el caso Odebrecht en Estados Unidos, donde se declararon culpables de blanquear 28 millones de dólares y de haber llevado a cabo sobornos en favor de la compañía brasileña "por órdenes del padre", como alegó su defensa.

"Panamá sigue en deuda de que su propia Justicia haga lo que debe hacer para confirmar estos serios cargos" de corrupción que acusa EE.UU.

"Todo viene de afuera, como ha sido costumbre, y localmente no tenemos procesos concluidos y eso, la verdad, es lamentable", dijo a EFE el expresidente del capítulo Panamá de Transparencia Internacional (TI), Carlos Barsallo.

Habla Antony Blinken

El secretario de Estado, Antony Blinken, dijo este jueves que la decisión sobre el expresidente Varela "reafirma el compromiso de EE.UU. con combatir la corrupción endémica en Panamá", y que espera que esta acción "impulse a los funcionarios y autoridades" panameños "a abordar la corrupción arraigada y empoderar a todos aquellos que defienden el estado de derecho".

"Es el mensaje de un político de un país, que insta a otro país a hacer su tarea. Nosotros tenemos que hacer nuestra tarea, tenemos que investigar y después de un debido proceso sancionar a quién haya violado las leyes. Eso es demasiado básico, pero se dice fácil y no se hace y tenemos muchos años en esta misma letanía", comentó Barsallo.

La ex procuradora general (fiscal general) y candidata a diputada independiente Ana Matilde Gómez coincidió con Barsallo en que ahora "le toca a la Justicia panameña hacer su parte".

"Espero que a la lista de Ricardo Martinelli y Juan Carlos Varela se sumen otros que hacen falta", afirmó a EFE Gómez, quien considera "oportuno que en la medida que se tengan las evidencias suficientes, se proceda, por todos los medios legales que corresponda, a sacar a la luz las acciones de los altos funcionarios públicos que han utilizado su poder para beneficiarse".

Para el abogado constitucionalista Ernesto Cedeño, el hecho de que Panamá tenga a dos expresidentes designados por corrupción por EE.UU. demuestra que la administración de Justicia en Panamá "está en cuidados intensivos".

"Para algunos casos de altos perfil y otros, la Justicia no funciona como corresponde, y eso tiene que ver mucho" con el hecho de que el sistema judicial carece de una "independencia plena, total y financiera" que le permita operar "sin tener que ver con los vaivenes de la política", afirmó el analista a EFE.

El expresidente Varela, que fue vicepresidente y canciller de Martinelli hasta que se distanciaron en el 2011, afirmó este jueves que fue un mandatario "honesto" y gestionó con "transparencia más de 20.000 millones de dólares" en obras, rechazando así la decisión de Estados Unidos de prohibirle la entrada en el país por corrupción.

"Haré todo lo que tenga que hacer para defender mi honra y la de mi familia", añadió Varela, que dirigió su mensaje al secretario Blinken.