El mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó este miércoles, al lado del presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, que las democracias de ambos países se enfrentan al extremismo.

En un pronunciamiento ante la prensa tras la reunión bilateral entre ambos, Lula subrayó que "no se puede transigir con el totalitarismo".

"España y Brasil son dos grandes democracias que enfrentan el extremismo, la negación de la política y el discurso de odio, alimentado por noticias falsas", dijo el gobernante brasileño.

El líder brasileño defendió que es necesario "unir todos los demócratas del mundo" contra el extremismo, en especial en países como España y Brasil, cuyos gobiernos poseen "gran afinidad".

Recalcó que la defensa de la democracia está "ligada con la lucha contra todas las formas de discriminación", entre las que citó los "episodios de racismo" que se han dado en varios ámbitos, "incluido el deporte".

Sánchez fue recibido en el Palacio presidencial de Planalto en el inicio de su visita oficial a Brasil, que concluirá este jueves en São Paulo.