El Tribunal Superior Electoral de Brasil le dio este lunes un plazo de tres días al expresidente Jair Bolsonaro para explicar el contenido de un proyecto de decreto encontrado en la residencia de uno de sus exministros y considerado como evidencia de que pretendía dar un golpe de Estado.

El ultimátum fue establecido en una sentencia del magistrado Benedito Gonçalves, de la corte electoral, que ordenó incluir el denominado "documento golpista" en una investigación que se adelanta contra el exmandatario por supuesto abuso de poder durante su campaña a las elecciones presidenciales de octubre.

El polémico texto es el borrador de un decreto que habría permitido a Bolsonaro instaurar un estado de excepción para intervenir el máximo tribunal electoral y revertir el resultado de las elecciones del 30 de octubre, en las que fue derrotado por el progresista Luiz Inácio Lula da Silva.

El documento fue encontrado por la Policía Federal en la residencia de Anderson Torres, quien fuera ministro de Justicia de Bolsonaro y detenido desde el sábado acusado de presunta omisión, pues era el responsable de la seguridad de Brasilia cuando miles de bolsonaristas asaltaron las sedes de la Presidencia, el Congreso y la Corte Suprema.

Además es investigado por asalto a sedes de los poderes

Golpistas brasileños de extrema derecha

Bolsonaro también fue incluido por la Corte Suprema en la lista de investigados por los sucesos violentos del 8 de enero, por su presunta participación como autor intelectual de la intentona golpista.

El cerco judicial se estrecha sobre el exmandatario, quien se encuentra actualmente en Estados Unidos y del que se sospecha que incitó a sus partidarios a invadir y destrozar las sedes del Parlamento, la Presidencia y el Supremo el 8 de enero.

Gonçalves también solicitó a la Corte Suprema que remita al tribunal electoral el documento que demostraría la supuesta intención del líder ultraderechista de dar un golpe y cualquier otra posible prueba encontrada en la casa de Torres que pueda servir en la investigación sobre el abuso político durante la campaña.

En caso de que Bolsonaro sea considerado responsable de abuso político y de uso de los medios de comunicación oficiales a favor de su campaña, el tribunal electoral puede condenarlo a un período de inhabilitación política de al menos ocho años.

Bolsonaro "lamenta" el asalto a los poderes

Bolsonaro ha sostenido este lunes, tras romper su silencio, que el asalto por parte de sus simpatizantes a las instituciones democráticas fue "increíble".

Bolsonaro, que ha hablado este lunes con varios simpatizantes que se encontraban frente a su alojamiento en Florida (Estados Unidos), ha indicado a su vez que lamentaba el episodio de vandalismo ocurrido en Brasilia.

"Lamento lo que pasó el día 8 (de enero), una cosa increíble", ha declarado el exmandatario en un vídeo recogido por el portal Metrópoles.

"En mi gobierno, la gente aprendió qué es la política, conoció los poderes fácticos, empezó a valorar la libertad", ha agregado el expresidente del país.

Además, Bolsonaro ha reconocido "algunos deslices" durante su mandato, que terminó el 31 de diciembre: "En cuatro años, todos los días eran lunes. ¿Tiene agujeros? Por supuesto que sí. Cometemos algunos errores, por lo que también los cometemos en el gobierno".

En este discurso, el exdirigente brasileño se ha tratado de distanciar de los ataques golpistas, contrastando con los discursos de sus seguidores, según informa el periódico 'Folha de Sao Paulo'.

Estas declaraciones se han producido días después de que el juez del Tribunal Supremo Alexandre de Moraes autorizase una investigación a Bolsonaro por presunta incitación al crimen, tras una petición de la Fiscalía.

El Ministerio Público considera que Bolsonaro ha incitado al crimen al publicar un vídeo en sus redes sociales cuestionando el resultado de las elecciones después del asalto.

De Moraes ha señalado que el exmandatario incurre reiteradamente en conductas investigadas en otras pesquisas. Además, el magistrado también ha abierto una investigación para investigar al exministro de Justicia y Seguridad Nacional Anderson Torres, y el gobernador de Brasilia, Ibaneis Rocha, ambos destituidos de su cargo.

(CON INFORMACIONES DE EFE Y EUROPA PRESS)