Con informaciones de AFP y EFE

El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, preconizó este martes un "diálogo directo" con China para terminar la guerra con Rusia, en una visita al país asiático, aliado de Moscú desde el inicio del conflicto en 2022.

"Es muy importante que Kiev y Pekín entablen un diálogo directo e intercambien posiciones" sobre el conflicto, declaró el canciller ucraniano en un vídeo publicado en redes sociales después de llegar a la capital china.China se presenta como un actor neutral en el conflicto y subraya que no está enviando asistencia letal a ninguna de las dos partes a diferencia de Estados Unidos y otras naciones occidentales.Sin embargo, su alianza "sin límites" con Rusia ha llevado a la OTAN a acusar a Pekín de ser un "facilitador decisivo" de la ofensiva de Moscú contra Ucrania, que el país comunista nunca ha condenado.

Kuleba, cuya visita se extenderá hasta el viernes, anunció que mantendría "conversaciones amplias, detalladas y sustanciales" con su homólogo chino, Wang Yi, para alcanzar una "paz justa" con Rusia.

Es su primera visita a China desde el estallido de la guerra en la exrepública soviética tras la invasión rusa.

Por su parte, China dijo que las conversaciones se centrarían en "promover la cooperación sino-ucraniana y otros temas de interés común".

"Del lado de la paz"

"Sobre la crisis ucraniana, China siempre ha creído que un alto el fuego y entendimiento político tempranos servirán a los intereses comunes de todas las partes", declaró el martes el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Mao Ning.

"China continuará del lado de la paz y el diálogo", agregó.

China ha intentado perfilarse como mediador en la guerra y ha mandado en varias ocasiones a Europa a su enviado especial en asuntos eurasiáticos Li Hui.

El presidente chino, Xi Jinping, dijo este mes al primer ministro húngaro, Viktor Orban, que las potencias mundiales tenían que ayudar a Rusia y Ucrania a reiniciar las negociaciones.

China también publicó un documento el año pasado en que pedía una "solución política" al conflicto, pero que recibió críticas occidentales por permitir a Rusia mantener parte del territorio ucraniano invadido.

Sin embargo, el país asiático fue una de las ausencias destacadas de la cumbre de paz celebrada el mes pasado en Suiza, en la que Rusia no había sido invitada.

En su mensaje el martes, Kuleba subrayó la necesidad de "evitar la competencia entre planos de paz" y añadió que China "debe contemplar las relaciones con nuestro país a través del prisma de sus relaciones estratégicas con Europa".

Alexander Gabuev, director del Carnegie Russia Eurasia Center, considera que Kiev usará esta semana para intentar "convencer a China de participar en una segunda cumbre de paz".

China se ha convertido en un apoyo político y económico crucial para una Rusia aislada por Occidente desde el inicio de la invasión.

Estados Unidos ha amenazado con sancionar a las instituciones financieras chinas vinculadas a la maquinaria de guerra de Rusia y tanto el país norteamericano como Europa acusaron a Pekín de vender a Moscú componentes y equipos necesarios para su producción armamentística.

Según Gabuev, Pekín puede aprovechar esta visita de Kuleba para obtener una compensación a cambio de acudir a la segunda cumbre de paz.

China podría "intentar sacar ventaja del interés ucraniano en una segunda cumbre de paz (…) para librarse de sanciones" de parte de los países occidentales, estimó.

Zelenski dice al enviado del Papa: “debemos poner fin a la guerra lo antes posible”

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, recibió este martes en Kiev al secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolín, y subrayó ante el enviado del Papa la necesidad de poner fin a la guerra lo antes posible.

“Creo que todos entendemos que debemos poner fin a la guerra lo antes posible, por supuesto, para no perder más vidas humanas”, dijo Zelenski durante su encuentro con el cardenal, que fue parcialmente grabado en un vídeo difundido en sus redes sociales por el presidente ucraniano.

Zelenski agradeció a Parolín su participación en la primera edición de la llamada Cumbre de Paz impulsada por Kiev, que reunió a mediados del mes pasado en Suiza a representantes de un centenar de países y organizaciones internacionales que abordaron las exigencias ucranianas para poner fin a la guerra.

Parolín está en Ucrania en lo que el Vaticano ha llamado un “viaje por la paz”. El jefe de la diplomacia vaticana participó este domingo en una peregrinación en el santuario mariano de la ciudad de Berichiv, unos 180 kilómetros al suroeste de Kiev. Durante el servicio religioso Parolín pidió la intercesión de la Virgen para lograr la paz en Ucrania.

El Vaticano ha abogado desde el principio de la guerra por un alto el fuego que lleve a una salida dialogada del conflicto. Muchos ucranianos han criticado esta postura del papa Francisco acusándole de equidistante.

Pese a ello, Ucrania y el Vaticano han trabajado en iniciativas humanitarias conjuntas como el retorno de los menores de territorios ucranianos ocupados deportados a Rusia.

Ante la falta de buenas noticias para Ucrania en el frente, Kiev ha cambiado de discurso en las últimas semanas y el presidente Zelenski ha llegado a declarar que es momento de poner fin a las hostilidades.

Ucrania prepara una hoja de ruta para la paz que podría serle presentado a Rusia en una segunda cumbre internacional como la celebrada en Suiza tras recibir el aval de parte de la comunidad internacional. El presidente ucraniano prevé que ese plan esté listo antes de final de año.

Rusia no fue invitada a la cumbre celebrada en Suiza el mes pasado. Zelenski y otros dirigentes ucranianos han manifestado su voluntad de que Moscú sí esté representada en la segunda edición de la cita, que fue concebida por Kiev para lograr apoyo global a sus condiciones para poner fin a la guerra.