En el marco de la XXVIII Cumbre Iberoamericana de Jefes y Jefas de Estado y de Gobierno, varios mandatarios señalaron la necesidad urgente de atender la crisis política y social que atraviesa Haití.
Asimismo, los mandatarios expresaron que la comunidad internacional debe priorizar la situación de esa nación para ayudarlos a tener una resolución positiva ante este conflicto.
El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, fue el primero en referirse al tema e indicó que el problema no se puede ignorar más.
“Esta conferencia debe hacer un llamado fuerte a las naciones unidas para que se brinde respuesta inmediata a las solicitudes de Haití para que ese país vuelva a tener control”, afirmó.
Chaves agregó que “no me parece justo decirle a la República Dominicana que mandé fuerzas armadas, aunque las tenga, a un país vecino”.
El jefe de Estado costarricense aseguró que el 70 por ciento del territorio de Puerto Príncipe está controlado por grupos criminales y eso no puede ser ignorado.
“Hay que apagar el incendio antes de preguntarnos cómo vamos a reconstruir esa casa y no es posponiéndolo”, aseveró.
Posterior a esa participación, el presidente dominicano, Luis Abinader resaltó que la solución de ese territorio debe estar orientada a la pacificación del país.
“La única forma de actuar con Haití es pacificar a Haití. Es la única forma, pacificar Haití. La comunidad internacional no puede permitir que siga esa situación en Haití”, dijo.
El primer mandatario agregó que “los que están pasando problemas en Haití son los pobres haitianos, los pocos ricos están en Miami y aquí en República Dominicana”.
Fuera del Centro de Convenciones del Ministerio de Relaciones Exteriores, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, manifestó que la crisis haitiana debe ser resuelta por ellos.
“Yo creo que es el pueblo haitiano el que tiene que resolver antes que nada su propia crisis, pero sí necesita la ayuda, una ayuda democrática”, precisó.
Petro aseguró que quiere visitar Haití porque el estado colombiano tiene cierto grado de corresponsabilidad por la situación actual de ese país debido a que varios de sus nacionales fueron implicados en el magnicidio del presidente Jovenel Moise.
“No creo que sea tanto intervención basada sobre armas y creo que se debe analizar el tema desde los contextos, incluso desde el americano”, subrayó.
Durante el turno de la delegación española, el jefe de gobierno Pedro Sánchez felicitó a su homólogo dominicano por su gestión y le externó que contaba con el apoyo de su nación para escalar a nivel multilateral la crisis que está viviendo Haití.