La Comunidad del Caribe (Caricom) informó este viernes que su Grupo de Personas Eminentes (EPG, en inglés) alcanzó un consenso en Haití para elaborar un proyecto temporal para una transición gubernamental basada en unas elecciones justas y libres.

El EPG afirmó en un comunicado que las negociaciones "brindaron la oportunidad de reducir las diferencias sobre los detalles del acuerdo de transición gubernamental".

"Las partes interesadas alcanzaron un consenso sobre varios aspectos del proyecto y han acordado continuar las discusiones entre ellas en ausencia del EPG sobre las áreas clave del equilibrio de poder y la representación dentro de los acuerdos de transición propuestos", esgrimió el documento.

El GPE manifestó su voluntad de regresar a Haití "una vez que las partes interesadas hayan realizado progresos significativos en sus discusiones informales y ofrezcan una clara indicación de su disposición a entrar en la última fase de las negociaciones".

Entre los miembros del EPG que visitaron a Haití, están los exprimer ministros de Jamaica, Bahamas y Santa Lucía, Bruce Golding, Perry Christie y Kenny Anthony, respectivamente.

Acompañados por el asesor especial del secretario general del Caricom en Haití, Colin Granderson; la asistente del secretario general de Relaciones Extranjeras y de la Comunidad del Caricom, Elizabeth Solomon, y la directora de proyectos, Nickeva Eve-Benjamin.

Tras cinco meses de consultas con el EPG, un grupo de accionistas haitianos comenzó a negociar los detalles del borrador.

La violencia de bandas en Haití ha causado 8.000 muertos este año y los criminales controlan un 80 % de la capital Puerto Príncipe.

Además, ha producido 200.000 desplazados internos, entre ellos 143.000 en la capital, y ha tenido graves efectos económicos (cuatro años consecutivos de recesión) y sociales, con un sistema sanitario al borde del colapso y las escuelas cerradas desde 2020, año en que las clases se suspendieron por la pandemia.

En octubre, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el despliegue de una misión de seguridad para Haití.

Además, la violencia de las bandas armadas se ha extendido en los últimos meses por varias zonas del país caribeño, incluyendo los departamentos de Grande Anse y Artibonito, este último principal centro de producción agrícola del país, aumentando el riesgo de hambruna en Haití.