Bolivia le pidió este viernes al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, "poner fin" a la hipocresía y la politización y consideró que el organismo multilateral pasa por su "peor época".
El vicecanciller boliviano, Freddy Mamani, representó a Bolivia ante la Asamblea General de la OEA que se celebra en Lima, con un discurso en el que hizo un llamado a los Estados a enfrentar las distintas crisis sanitaria, ambiental y alimentaria de manera conjunta ante el "deterioro" del sistema multilateral.
"Lastimosamente observamos el deterioro creciente del sistema multilateral por el capricho de las potencias de no resignarse a la existencia de un mundo multipolar, razonable y con equilibrio de poder", señaló Mamani.
El vicecanciller defendió que "el multilateralismo es el único mecanismo que representa una garantía de respeto entre los Estados independientemente de su poder económico, militar que hoy está en crisis a nivel mundial".
"Si hablamos del multilateralismo regional la situación es aún más grave. El sistema interamericano de integración, el más antiguo del mundo, se encuentra sumido en la peor de su crisis de su historia, coaptado por intereses parciales, mezquinos y sectarios, se debilita cada día más", afirmó.
La OEA "socava los principios elementales de la igualdad soberana de los Estados empleando un doble rasero y afín a los intereses del capitalismo y el imperialismo", cuestionó sobre la organización a la que el Gobierno boliviano responsabiliza en parte por la crisis de 2019 tras las elecciones fallidas y la renuncia de Evo Morales a la Presidencia.
"Sin duda la peor época de la organización es esta, donde se han perdido hasta la formas, sometiendo a los Estados y no al servicio de ellos como debería ser", agregó.
En su intervención Freddy Mamani también cuestionó que pese a que "todos los días escuchamos voces de crítica y pedidos de cambio (…) empero nada parece cambiar. Evento tras evento tomamos conciencia de la crisis de la organización pero no hemos sido hasta ahora capaces de darle una solución".
Y en ese sentido, demandó "al secretario general de esta organización poner fin a la hipocresía, la selectividad, la politización y los dobles raseros que son prácticas nocivas al derecho internacional".
El vicecanciller recordó que en 2014 los Estados que integran la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) declararon a la región "como zona de paz , comprometiéndonos a resolver de manera pacífica nuestras controversias y desterrando para siempre el uso de la fuerza en la región, fortaleciendo el proceso de integración".
SALUD Y SEGURIDAD ALIMENTARIA
La pandemia de la covid-19 "expuso las desigualdades y debilidades más graves del sistema de salud en todo el continente, así como la vulnerabilidad del sistema financiero y económico de la región", mencionó Mamani.
Por lo que planteó que "una labor coherente de nuestros países sería propiciar sistemas de salud universales que no beneficien solo a los que tienen acceso a seguros privados sino al pueblo en general".
También se refirió a la crisis alimentaria como "una crisis estructural del capitalismo" y propuso que se debe "generar un programa regional de soberanía alimentaria que garantice a los pequeños productores mejores condiciones para la producción, el acceso a semillas, fertilizantes, tecnología, crédito y acceso a mercados en mejores condiciones".
SALIDA AL MAR
El vicecanciller aprovechó su intervención para reivindicar el reclamo de Bolivia por una salida al mar al mencionar que se deben "buscar los mejores mecanismos para corregir los desequilibrios regionales de los que somos víctimas los países sin litoral".
"En busca de una cultura de igualdad, justicia y no discriminación entre los países de la región es nuestro deber buscar los mejores mecanismos para corregir los desequilibrios regionales de los que somos víctimas los países sin litoral, en el caso de nuestro país privados de su litoral", dijo.
También señaló que "está demostrado que somos doblemente afectados por los altos costos de exportación e importación de productos y nuestro desarrollo se ve obstaculizado".
Bolivia "nació con mar, sin embargo, en la actualidad es un país enclaustrado que enfrenta diversas dificultades sobre transporte, comunicación y medidas que afectan gravemente el comercio y desarrollo", señaló.
"Más temprano que tarde esperamos que las injusticias sean separadas y el diálogo y la diplomacia puedan triunfar para reparar el daño causado por una guerra impulsada por intereses capitalistas", finalizó.