El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, trabajó junto a Brasil el jueves en Río de Janeiro con vistas a enviar una fuerza policial multinacional a Haití, un país azotado por la violencia y que atraviesa una grave crisis política y humanitaria.

Blinken organizó junto con Brasil una reunión sobre este tema al margen de un encuentro de ministros de Asuntos Exteriores de los países del G20.

"Creo que es seguro decir que uno de los desafíos más apremiantes que enfrentamos como comunidad internacional está en Haití", dijo el jefe de la diplomacia estadounidense al inicio de la cita, en la que participan, además de Brasil, representantes de varios países, entre ellos Canadá, Kenia y la propia Haití, así como una delegación de las Naciones Unidas.

"El éxito (de esta misión) depende de asegurar las contribuciones internacionales que Haití necesita. Mejorar la situación de seguridad es de interés colectivo", añadió, precisando que Estados Unidos podría aportar unos 200 millones de dólares a esta fuerza.

En octubre, el Consejo de Seguridad de la ONU acordó enviar una misión multinacional encabezada por Kenia a Haití.

Sin embargo, un tribunal de Nairobi bloqueó a finales de enero el envío previsto de 1.000 agentes de policía kenianos. El gobierno del país africano anunció que impugnaría esta decisión.

Según estimaciones recientes, la fuerza multinacional debería contar con al menos 2.500 integrantes. Durante la reunión en Rio, Canadá, Benin, Francia, Alemania y Jamaica anunciaron contribuciones financieras o de personal, según un comunicado de prensa del Departamento de Estado.

Blinken pide elecciones democráticas en Haití para lograr la estabilidad

Blinken pidió, además, el desbloqueo de la situación política en Haití y la celebración de elecciones democráticas para que el país caribeño pueda superar la grave crisis por la que atraviesa.

El jefe de la diplomacia estadounidense presidió un encuentro con cancilleres sobre la situación en Haití, en los márgenes de la reunión de ministros de Exteriores del G20 que se celebra estos días en Río de Janeiro (Brasil).

Al iniciar la sesión, Blinken reiteró el apoyo de Estados Unidos a la misión multinacional liderada por Kenia que debe desplegarse en Haití para atajar la violencia y la inseguridad, pero remarcó que la estabilidad solo se podrá conseguir con la "restauración" de la democracia.

"La única forma de lograr la paz y la estabilidad a largo plazo es a través de elecciones libres y justas", dijo.

El primer ministro haitiano, Ariel Henry, que concluyó el 7 de octubre pasado su mandato según un acuerdo político de 2022, continúa en el poder y ha prometido celebrar elecciones cuando la situación de seguridad lo permita.

Alemania, Canadá, Francia, Jamaica y Benín se unieron este miércoles a Estados Unidos en el apoyo a la misión y expresaron compromisos financieros y de personal para la misma, anunció el Departamento de Estado en un comunicado.

Estos países respondieron así a la petición que durante el mismo encuentro hicieron los representantes de Haití y de Kenia, quienes destacaron "la necesidad urgente de que haya un sólido apoyo internacional a la misión".

Naciones Unidas estableció un fondo fiduciario para esta misión que puede recibir contribuciones adicionales de los países que lo deseen.

Según fuentes estadounidenses, el principal reto logístico de la misión no es encontrar el personal suficiente, sino recabar suficientes recursos y equipos.

El Consejo de Seguridad de la ONU autorizó en 2023 el envío de una misión de apoyo a la Policía Nacional de Haití, en respuesta a la solicitud manifestada por el primer ministro del país, Ariel Henry, en octubre de 2022 para erradicar a las bandas armadas, que actualmente controlan el 80 % de la capital.

La fuerza internacional será liderada por el Gobierno de Kenia, aunque el despliegue de la misión de seguridad está sufriendo retrasos, ya que el plan ha sido bloqueado por los tribunales kenianos.

Según datos de la ONU, en 2023 fueron asesinadas en Haití 4.789 personas, 1.698 resultaron heridas y 2.490 secuestradas, siendo la tasa de homicidios en el país de 40,9 por 100.000, el doble del año anterior y una de las más altas del mundo.

Dimite el representante de Haití ante la OEA acusado en el magnicidio de Moise

PUERTO PRÍNCIPE (HAITÍ), 22/02/2024.- Fotografía de archivo fechada el 15 de julio de 2021 que muestra al entonces director de la Policía Nacional haitiana, Leon Charles, durante unas declaraciones a la prensa en la sede de la Dirección General de la Policía en Puerto Príncipe (Haití). El representante permanente de Haití ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Léon Charles, antiguo jefe de la Policía Nacional, ha presentado su dimisión al cargo, tras haber sido imputado en el caso del asesinato en 2021 del presidente Jovenel Moise. EFE/ Orlando Barría

El representante permanente de Haití ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Léon Charles, presentó su dimisión al cargo, tras haber sido imputado en el caso del asesinato en 2021 del presidente Jovenel Moise.

Charles anunció este jueves su dimisión junto a la carta enviada al ministro haitiano de Asuntos Exteriores y Culto, Jean Victor Généus, para de esta forma, escribió, "tener campo libre para defenderme contra las acusaciones descabelladas" que aparecen en la orden dictada por el juez Walther Voltaire contra 51 personas, entre ellas también Martine Moïse, viuda del asesinado presidente, y el ex primer ministro Claude Joseph.

En la carta remitida al jefe de la diplomacia haitiana, fechada el 21 de febrero, Charles informa al ministro de que presenta su dimisión tras haber sido procesado "de manera absolutamente injusta y calumniosa" por orden del juez de instrucción a cargo del magnicidio de Moise.

"Determinado, aunque la orden no me haya sido aún notificada, a combatir con vigor, por todos los cauces jurídicos, las fantasiosas acusaciones en mi contra a fin de hacer que se reconozca mi inocencia y lavar mi honor (y) para tener a este fin toda la libertad de maniobra y de palabra necesaria", indica Charles al comunicar su decisión de dimitir.

De hecho, la misiva ya la firma como "ex representante permanente" de Haití ante la OEA.

El lunes pasado, EFE tuvo acceso al informe judicial del juez Walther Voltaire en el que acusa a Martine Moïse y a Claude Joseph de complicidad y asociación criminal para cometer el magnicidio en 2021.

Junto a ellos, también se imputa a Léon Charles, antiguo jefe de la Policía Nacional, por los cargos de asesinato, tentativa de asesinato, posesión y porte ilegal de armas, conspiración contra la seguridad interna del Estado y asociación para delinquir.

Entre los 51 imputados en total hay también 17 colombianos y los haitiano-estadounidenses Christian Emmanuel Sanon, James Solage y Joseph Vincent; quienes fueran coordinador y jefe de seguridad de Moise, Jean Laguel Civil y Dimitri Hérard, respectivamente; el exagente de la Unidad Anticorrupción Joseph Félix Badio y los exministros Ardouin Zéphirin y Louis Edner Gonzague Day.

"Existen cargos concordantes y pruebas suficientes para justificar su responsabilidad en los hechos que se les imputan", según el magistrado, que los remite "al Tribunal Penal, reunido sin asistencia de jurado, para ser juzgados por los hechos de asociación para delinquir, robo a mano armada, terrorismo, asesinato y complicidad en asesinato, delitos cometidos en perjuicio de Jovenel Moise".

El juez envió su auto a un fiscal que ahora informará a las personas vinculadas sobre la acusación y el próximo paso consistirá en que el presidente del Tribunal Supremo haitiano organice un juicio.

Por el caso ya se han declarado culpables cinco personas ante la Justicia de Estados Unidos, donde se planificó y financió el complot contra Moise, torturado y asesinado el 7 de julio de 2021 en su residencia de Puerto Príncipe por un grupo de mercenarios, en su mayoría colombianos.

(Con informaciones de las Agencias EFE y AFP)