El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, ha entregado al Tribunal Superior de Londres una solicitud para recurrir su extradición a Estados Unidos, que lo requiere para juzgarlo por delitos de espionaje.
El activista, que cumplirá este domingo 51 años, continúa en la prisión de máxima seguridad de Belmarsh, en Londres, mientras se resuelve su apelación contra su entrega a Washington.
El pasado 17 de junio, la ministra británica del Interior, Priti Patel, firmó la orden para extraditar al periodista australiano a Estados Unidos, que lo requiere por cargos de espionaje.
Semanas antes, el 20 de abril, un juez de un tribunal británico había emitido una orden de entrega a la Justicia estadounidense para que sea considerada por el Gobierno del Reino Unido.
Estados Unidos reclama a Assange para procesarlo por 18 delitos de espionaje e intrusión informática por las revelaciones de su portal que, según su equipo legal, pueden suponer hasta 175 años de cárcel en ese país.
Mientras se resuelve el futuro del australiano, su esposa, Stella, y simpatizantes de Assange celebraron hoy una protesta a las afueras de la sede del Home Office – Ministerio británico de Interior – en el centro de Londres para intensificar los llamamientos para que quede en libertad.