El presidente electo de EE.UU., Donald Trump, nombró el viernes al multimillonario gestor de fondos de cobertura Scott Bessent como nuevo secretario del Tesoro. También nombró a Russel Vought como su nuevo jefe de presupuesto y a Janette Nesheiwat como cirujana general, entre una serie de nuevos nombramientos. Vought es uno de los principales arquitectos del Proyecto 2024, el plan de la derecha para reformar el gobierno, y Nesheiwat es una médica generalista que colabora con Fox News.
El presidente electo Donald Trump anunció el viernes que nombrará al gestor de fondos de cobertura Scott Bessent, defensor de la reducción del déficit, como próximo secretario del Tesoro.
Trump también dijo que nominaría a Russell Vought para dirigir la Oficina de Gestión y Presupuesto, un puesto que Vought ocupó durante la primera presidencia de Trump. Vought estuvo estrechamente involucrado en el Proyecto 2025, un plan conservador para el segundo mandato de Trump del que intentó distanciarse durante la campaña.
Los anuncios mostraron cómo Trump está perfilando el aspecto financiero de su nueva administración. Aunque Bessent está estrechamente alineado con Wall Street y podría ganarse el apoyo bipartidista, Vought es conocido como un republicano de línea dura.
Trump dijo que Bessent "me ayudaría a marcar el comienzo de una nueva Edad de Oro para Estados Unidos", mientras que Vought "sabe exactamente cómo desmantelar el Estado profundo y acabar con el Gobierno armado".
Bessent y Vought fueron sólo dos de varias decisiones de personal que Trump reveló el viernes por la noche.
Trump dijo que eligió a la representante Lori Chávez-DeRemer, republicana de Oregón, como su secretaria de Trabajo, y a Scott Turner, un exjugador de fútbol americano que trabajó en la primera administración de Trump, como su secretario de Vivienda.
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Además, Trump completó su equipo sanitario. Eligió a la doctora Janette Nesheiwat, médico generalista y colaboradora de Fox News, como cirujana general; al doctor Dave Weldon, ex congresista republicano por Florida, para dirigir los Centros de Control y Prevención de Enfermedades; y al doctor Marty Makary, cirujano de Johns Hopkins, como jefe de la Administración de Alimentos y Medicamentos. Trump había dicho previamente que nombraría a Robert F. Kennedy Jr., un viejo divulgador de teorías conspirativas sobre las vacunas, como secretario de Sanidad.
Alex Wong fue nombrado principal asesor adjunto de seguridad nacional, mientras que Sebastian Gorka se desempeñará como director principal de contra terrorismo. Wong trabajó en asuntos relacionados con Asia durante el primer mandato de Trump, y Gorka es un comentarista conservador que pasó menos de un año en la Casa Blanca de Trump.
Bessent, de 62 años, es el fundador del fondo de cobertura Key Square Capital Management, tras haber trabajado de forma intermitente para Soros Fund Management desde 1991. De ser confirmado por el Senado, sería el primer secretario del Tesoro abiertamente gay del país.
En agosto declaró a Bloomberg que atacar la deuda nacional de Estados Unidos debería ser una prioridad, lo que incluye recortar programas gubernamentales y otros gastos.
"Este ciclo electoral es la última oportunidad que tiene Estados Unidos de salir de esta montaña de deuda sin convertirse en una especie de democracia socialista al estilo europeo", declaró entonces.
A fecha del 8 de noviembre, la deuda nacional asciende a 35,94 billones de dólares, y tanto la administración de Trump como la de Biden se han sumado a ella. Las políticas de Trump añadieron 8,4 billones de dólares a la deuda nacional, mientras que la administración Biden aumentó la deuda nacional en 4,3 billones de dólares, según el Comité para un Presupuesto Federal Responsable, un organismo de control fiscal.
Incluso mientras presiona para reducir la deuda nacional deteniendo el gasto, Bessent ha respaldado la ampliación de las disposiciones de la Ley de Recortes de Impuestos y Empleos de 2017, que Trump firmó como ley en su primer año en el cargo. Las estimaciones de diversos análisis económicos sobre los costes de los distintos recortes fiscales oscilan entre casi 6 y 10 billones de dólares en 10 años. Casi todas las disposiciones de la ley expiran a finales de 2025.
Antes de convertirse en donante y asesor de Trump, Bessent hizo donaciones a varias causas demócratas a principios de la década de 2000, en particular a la candidatura presidencial de Al Gore. También trabajó para George Soros, uno de los principales partidarios de los demócratas. Bessent tuvo un papel influyente en las operaciones de Soros en Londres, incluida su famosa apuesta de 1992 contra la libra, que generó enormes beneficios el "Miércoles Negro", cuando la libra se desvinculó de las divisas europeas.
La elección de Bessent no fue sorprendente; había sido uno de los nombres que se barajaron para el puesto de Secretario del Tesoro. En un acto del Club Económico de Detroit en octubre, Trump llamó a Bessent "uno de los mejores analistas de Wall Street".
Bessent dijo a Bloomberg en agosto que considera los aranceles como un "ajuste de precios único" y "no inflacionista", y que los aranceles impuestos durante una segunda administración Trump se dirigirían principalmente a China. Y escribió en un artículo de opinión en Fox News esta semana que los aranceles son "una herramienta útil para lograr los objetivos de política exterior del presidente", como animar a los aliados a gastar más en defensa o disuadir de una agresión militar.
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Bessent también ha planteado ideas sobre cómo la administración Trump podría presionar al presidente de la Reserva Federal (FED), Jerome Powell, cuyo mandato expira en mayo de 2026. El mes pasado, Bessent sugirió que Trump podría nombrar a un presidente sustituto antes de tiempo, y dejar que esa persona funcionara como un presidente "en la sombra", con el objetivo esencial de dejar de lado a Powell.
Pero tras las elecciones, Bessent se echó atrás. Powell, por su parte, ha dicho que no dimitiría si Trump se lo pidiera, y ha añadido que Trump, como presidente, no tiene autoridad para despedirle.
Trump atacó repetidamente a Powell durante su primer mandato como presidente por subir el tipo de interés oficial de la FED en 2017 y 2018. Durante la campaña de 2024, dijo que como presidente debería tener "voz y voto" en las decisiones del banco central sobre los tipos de interés. Tradicionalmente, los presidentes evitan comentar las políticas de la FED.
Vought, de 48 años, fue director de la Oficina de Gestión y Presupuesto desde mediados de 2020 hasta el final del primer mandato de Trump en 2021, tras haber ocupado anteriormente los cargos de director en funciones y subdirector. Graduado por el Wheaton College y la Facultad de Derecho de la Universidad George Washington, tenía un profundo conocimiento de las finanzas gubernamentales que se ha unido a su propia fe cristiana.
Tras el final del mandato inicial de Trump, Vought fundó el Center for Renewing America, un think tank que describe su misión como la renovación de "un consenso de América como una nación bajo Dios".
El Centro para la Renovación de América publicó su propia propuesta de presupuesto para 2023 titulada "Un compromiso para acabar con el trabajo y el gobierno armado" La propuesta preveía reducciones del gasto por valor de 11,3 billones de dólares a lo largo de 10 años y unos 2 billones de dólares en recortes del impuesto sobre la renta con el fin de lograr un superávit presupuestario en 2032.
"La amenaza inmediata a la que se enfrenta la nación es el hecho de que el pueblo ya no gobierna el país; en su lugar, el propio gobierno se está convirtiendo cada vez más en un arma contra las personas a las que debe servir", escribió Vought en la introducción.
El plan presupuestario propuesto por Vought recortaría el gasto en ayuda alimentaria a través del Departamento de Agricultura. Se reducirían 3,3 billones de dólares en el Departamento de Salud y Servicios Humanos, en gran parte por la forma en que se distribuyen los fondos de Medicaid y Medicare.También contiene unos 642.000 millones de dólares en recortes a la Ley de Asistencia Sanitaria Asequible. Y se recortarían los presupuestos de los departamentos de Vivienda y Desarrollo Urbano y de Educación.
Las ideas presupuestarias de Vought eran independientes de Trump, que no ha explicado del todo los detalles de sus planes económicos, aparte de hacer campaña sobre recortes del impuesto sobre la renta y subidas de aranceles.
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Chávez-DeRemer, de 56 años, la secretaria de Trabajo elegida por Trump, perdió por un estrecho margen su candidatura a la reelección a principios de este mes. Recibió un fuerte respaldo de los sindicalistas de su distrito.
Chávez-DeRemer es una de los pocos republicanos de la Cámara de Representantes que respaldan la Ley de Protección del Derecho de Sindicalización (PRO, por sus siglas en inglés), que permitiría a más trabajadores llevar a cabo campañas de sindicalización y añadiría sanciones para las empresas que violen los derechos de los trabajadores.
La ley también debilitaría las leyes de "derecho al trabajo" que permiten a los empleados de más de la mitad de los estados evitar participar o pagar cuotas a los sindicatos que representan a los trabajadores en sus lugares de empleo.
Trump dijo en un comunicado que ella ayudaría a "garantizar que el Departamento de Trabajo pueda unir a los estadounidenses de todos los orígenes detrás de nuestra Agenda para el Éxito Nacional sin precedentes".
Este artículo es una adaptación de su original en inglés