El mandatario de Ecuador, Daniel Noboa, anunció este martes 7 de enero que, durante cuatro días, la Presidencia quedará a cargo de la vicepresidenta temporal, Cynthia Gellibert. El anuncio tiene lugar en plena campaña electoral, en la que el jefe de Estado busca seguir al mando del país, mientras mantiene una disputa de poder con su actual fórmula de Gobierno, Verónica Abad.

El jefe de Estado de Ecuador, Daniel Noboa, anunció mediante un decreto emitido este martes 7 de enero que la vicepresidenta interina, Cynthia Natalie Gellibert, asumirá el cargo de presidenta interina desde el jueves 9 de enero hasta el domingo 12 del mismo mes. 

Ello, "en razón de la ausencia temporal del Presidente de la República por la circunstancia de fuerza mayor" expuesta en el decreto ejecutivo en el que, entre otros temas, hace referencia a reformas a la ley electoral y a que sus actos públicos correspondientes a su función pudiesen ser interpretados como proselitismo político.

La medida habilita a Noboa para que participe en actividades relacionadas con su campaña para la reelección, una acción que ha desatado un intenso debate político sobre la legitimidad de este movimiento y ha profundizado la disputa entre Noboa y Verónica Abad, la vicepresidenta electa.

La decisión se produce en un contexto de tensiones acumuladas entre las principales figuras del Ejecutivo ecuatoriano. 

Gellibert, designada como vicepresidenta interina apenas el sábado pasado, reemplaza a otro interino nombrado previamente en un escenario que ha exacerbado las diferencias entre Noboa y Abad.

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La disputa entre Noboa y Abad

Y es que el enfrentamiento entre Noboa y Abad no es nuevo. En noviembre de 2024, el Ministerio de Trabajo suspendió a Abad de su cargo por cinco meses sin sueldo, alegando un “abandono injustificado de trabajo” tras su negativa a viajar de Israel a Turquía en una misión diplomática. 

Esta decisión, respaldada por el presidente, generó críticas del Congreso y una acción legal por parte de Abad.

El 23 de diciembre de 2024, un tribunal ecuatoriano revocó la suspensión y restituyó a Abad en su cargo, alegando violaciones a sus derechos constitucionales. 

Además, la ministra de Trabajo, Ivonne Núñez, fue obligada a ofrecer disculpas públicas; sin embargo, ese mismo día Noboa designó a Abad como consejera temporal en la Embajada de Ecuador en Turquía, con instrucciones de presentarse en Ankara antes del 27 de diciembre. Esa orden que no fue cumplida por Abad, lo que llevó al Ejecutivo a nombrar a Sariha Moya como vicepresidenta interina.

Por el momento, el decreto presidencial de Noboa establece que Cynthia Natalie Gellibert asumirá la presidencia interina durante los períodos en los que Noboa participe en la campaña electoral en la que desea hacerse campo.

Esta rotación en el cargo de vicepresidente interino ha generado críticas de algunos sectores políticos y analistas que cuestionan la estabilidad institucional del país.

Por su parte, Verónica Abad continúa desafiando la decisión de Noboa, para lo cual presentó un recurso ante la Corte Constitucional para impugnar su destitución temporal. 

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Abad reclama su derecho constitucional

A pesar de su destitución temporal, Abad argumenta que, como vicepresidenta electa, tiene el derecho constitucional de asumir la Presidencia en ausencia de Noboa. 

Durante el pasado fin de semana, hizo un llamado a las Fuerzas Armadas para respaldar su reclamación, pero los militares emitieron un comunicado reafirmando su compromiso con la Constitución y seguir las directrices del presidente en funciones.

La disputa también pone en evidencia las fracturas políticas que han marcado la relación entre Noboa y Abad desde que asumieron el poder en 2023. 

La alianza formada durante las elecciones presidenciales se desmoronó rápidamente debido a profundas diferencias ideológicas: mientras Noboa lidera una derecha liberal, Abad defiende una línea más conservadora y radical.

Y es que desde el inicio de su mandato, las tensiones fueron evidentes. Noboa nombró a Abad embajadora en Israel en un intento, según ella, de mantenerla alejada del poder. 

La relación se deterioró aún más cuando Noboa, en declaraciones irónicas, comentó que “la podría haber enviado a la Antártida”.

En diciembre pasado, la decisión de enviar a Abad a Turquía como consejera temporal fue percibida como un nuevo intento de aislarla políticamente. 

Abad, sin embargo, sostiene que cumplirá con la orden dentro del plazo de 30 días estipulado por la Ley de Servicio Exterior ecuatoriana.

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¿Puede Noboa darse una licencia presidencial?

En medio de la controversia, el ministro de Gobierno, José de la Gasca, declaró que no es obligatorio que Noboa solicite licencia para participar en la campaña electoral. 

De la Gasca argumentó que, según el Código de la Democracia, la licencia solo es obligatoria para quienes buscan la reelección en un mandato completo, algo que en términos generales no aplicaría sobre Noboa, quien está completando el periodo de su predecesor, Guillermo Lasso, tras la disolución del Parlamento en 2023.

A pesar de ello, el presidente decidió ceder temporalmente el cargo, argumentando en el decreto que la medida busca garantizar “transparencia, equidad y seguridad jurídica”.

Además, enfatizó la importancia de separar las actividades oficiales de las de campaña para asegurar un uso adecuado de los recursos públicos.

Mientras Noboa se prepara para enfrentar una campaña electoral competitiva, el conflicto con Abad y la incertidumbre sobre el futuro de la presidencia interina plantean serios retos para su Gobierno y la estabilidad política de Ecuador. 

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Con AP, Reuters y EFE.