Aunque los socialdemócratas proeuropeos obtuvieron el domingo el 22,4% de los votos, las elecciones legislativas en Rumania estuvieron marcadas por un claro avance de la extrema derecha, ya que la suma de sus fuerzas obtuvo el 31% de los sufragios. Estos resultados auguran unas difíciles negociaciones para formar gobierno.
El avance de la extrema derecha se confirmó en las elecciones legislativas rumanas.
Los socialdemócratas proeuropeos -el PSD, que hasta ahora gobernaba con los liberales- se impusieron el domingo 1 de diciembre con un 22,4% de los votos, por delante de los demás partidos, según los resultados prácticamente definitivos (más del 99% de las circunscripciones escrutadas).
Sin embargo, las fuerzas de extrema derecha sumaron el 31% de los votos, tres veces más que en las anteriores elecciones de 2020.
En una secuencia sin precedentes, estas elecciones se celebran una semana después del sorprendente éxito del candidato ultraderechista Calin Georgescu en la primera vuelta de las elecciones presidenciales. El resultado suscitó temores en todo el continente sobre el posicionamiento estratégico de Rumania.
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El analista político Cristian Pirvulescu cree que las elecciones legislativas no han aclarado la situación. "Nos enfrentamos a un Parlamento extraordinariamente fragmentado, lo que plantea muchos riesgos" y augura negociaciones difíciles para formar gobierno, declaró a la AFP.
Avance de los nacionalistas
El primer ministro socialdemócrata Marcel Ciolacu, eliminado de la carrera presidencial el pasado domingo, se felicitó por el primer puesto de su partido, pero destacó el avance de los nacionalistas.
"El pueblo rumano ha enviado una señal importante a la clase política", reaccionó: seguir por la senda europea “pero también proteger nuestra identidad y nuestros valores nacionales”.
La extrema derecha, dispersa en varias formaciones que tienen en común su oposición al apoyo a Kiev en nombre de la "paz" y su defensa de los "valores cristianos", se congratuló por los resultados.
Los rumanos reclaman el derecho a decidir su propio destino
"Hoy, el pueblo rumano ha votado a las fuerzas soberanistas", declaró el líder del partido AUR (Alianza para la Unidad de Rumanía), George Simion, que obtuvo el 17,8% de los votos.
"Este es el comienzo de una nueva era en la que los rumanos reclaman el derecho a decidir su propio destino", añadió, mientras la participación alcanzaba su nivel más alto en dos décadas (52%) para unas elecciones legislativas.
En el mismo campo, SOS Rumania, liderado por la tempestuosa candidata pro-Kremlin Diana Sosoaca, y el flamante Partido de la Juventud (POT) entraron en el Parlamento con el 7,2% y el 6,3% de los votos, respectivamente.
Llamamiento a un "gobierno de unidad nacional" proeuropeo
Desde la caída del comunismo en 1989, el país nunca había visto un estallido semejante, pero el enfado de gran parte de sus 19 millones de habitantes hierve a fuego lento ante las dificultades económicas y la guerra al otro lado de la frontera.
"Este fuerte aumento de la extrema derecha, en torno a un tercio del electorado, da testimonio de las frustraciones acumuladas en la sociedad y del descontento económico", comentó el analista Radu Magdin.
Sin embargo, a falta de aliados, su acceso al poder está lejos de estar garantizado. Varios líderes políticos ya han pedido un "gobierno de unidad nacional" decididamente proeuropeo.
"Unidos, podemos hacer maravillas", dijo la líder del centrista USR (11,6%), Elena Lasconi, que la semana pasada se clasificó para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales.
Tras "estos días de pesadilla", llamó a dejar a un lado las rencillas partidistas para defender la "democracia" y la independencia de Rumania de Rusia.
Las elecciones se celebraron en un clima febril, después de que la Justicia decidiera recontar las papeletas de la primera vuelta de las presidenciales, en medio de sospechas sobre la integridad de los comicios.
Las autoridades cuestionaron la influencia rusa en el actual contexto regional y el papel de la plataforma TikTok. Tanto es así que el Tribunal Constitucional ha ordenado un recuento y debe pronunciarse el lunes. Si no se anula el escrutinio, la segunda vuelta tendrá lugar el 8 de diciembre.
Con AFP
Este artículo fue adaptado de su original en francés