Es la primera vez que el presidente ruso va a los territorios tomados por Rusia en la región ucraniana del Donbas, desde el inicio de la guerra. Vladimir Putin llegó a Mariúpol después de pasar por Crimea el sábado, en el noveno aniversario de la anexión de esta península ucraniana a territorio ruso.
Fue el portavoz del Kremlin, DmitryPeskov, quien confirmó la llegada del presidente de Rusia, Vladimir Putin a Mariúpol, una ciudad en territorio ucraniano que desde el año pasado está bajo control ruso.
La visita sorpresiva de Putin se dio solo dos días después que la Corte Penal Internacional (CPI) emitiera una orden de arresto en su contra, orden que el Kremlin calificó de inválida, pues Rusia no reconoce la jurisdicción de la CPI y no es firmante del Estatuto de Roma, el tratado constituyente de la organización. Putin, particularmente, no se ha pronunciado al respecto.
Las agencias de noticias rusas informaron que Putin llegó a Mariúpol en helicóptero, en lo que supone el mayor acercamiento que el mandatario ruso ha hecho de las líneas del frente de la guerra desde que inició el conflicto el 24 de febrero.
Peskov dijo a los periodistas que el presidente ruso fue con la intención de "inspeccionar el trabajo del puesto (de mando) en su modo ordinario de operación".
En entrevista con la agencia estatal RIA, este domingo 19 de marzo, el viceprimer ministro ruso, MaratKhusnullin, aseguró que Rusia había tomado Mariúpol para nunca más devolverla. Además, explicó que el Gobierno tenía como objetivo terminar la reconstrucción del centro de la ciudad para finales de este año y que estaban ahí “para quedarse”.
"La gente ha comenzado a regresar. Cuando vieron que la reconstrucción estaba en marcha, la gente comenzó a regresar activamente", dijo Khusnullin a RIA.
Una vez en la ciudad, mientras conducía un automóvil, el presidente recorrió varios distritos e hizo algunas paradas para hablar con los residentes.
Al mandatario de la gran nación ex soviética se le vio manejando por los sitios conmemorativos de la ciudad ucraniana como una sala de conciertos y la costa, según informes de prensa rusos.
En videos del canal estatal de Rossiya 24, se le ve a Putin charlando con los residentes a fuera de lo que parecía un complejo residencial de nueva construcción y siendo mostrado alrededor de uno de los apartamentos.
Después de haber culminado su paso por Mariúpol, Putin tuvo una reunión con líderes militares y tropas rusas en un puesto de mando en Rostov–on-Don, una ciudad del sur de Rusia a unos 180 kilómetros más al este.
El Kremlin dio a conocer, además, que el mandatario se reunió con el general ValeryGerasimov, el hombre a cargo de las operaciones militares rusas en Ucrania.
La toma de Mariúpol
Esta ciudad portuaria, ubicada en la región oriental de Ucrania, se convirtió en el símbolo mundial luego de que las tropas ucranianas, superadas en armas y en número, resistieran a los ataques de Moscú en la fábrica de acero Azovstal durante casi tres meses, antes de rendirle el control a las tropas de Moscú en mayo de 2022.
La captura de Mariúpol significó para Putin su primera gran victoria luego de la fallida toma de la capital, Kiev. Cuando capturó por completo la ciudad, en mayo, organizaciones internacionales estimaron que solo quedaron 100.000 personas, de una población de 450.000.
Muchos se quedaron atrapados sin agua, comida, electricidad o calefacción y con el panorama su ciudad reducida a ruinas.
Una semana después, unas 300 personas murieron en el bombardeo de un teatro que servía como el refugio antiaéreo más grande de la ciudad. La evidencia obtenida por la agencia de noticias AP, estimó que el número real de muertos pudo haber estado cerca de las 600 personas.
Ubicada en el mar de Azov, Mariúpol apareció en las portadas de la prensa internacional cuando se conoció el bombardeo de un hospital materno infantil en medio de ataques entre Kiev y Moscú el 9 de marzo de 2022. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, dijo que este hecho sería la prueba del "genocidio de los ucranianos" y La Organización para la Seguridad y la Cooperación y Europa (OSCE) dijo que el bombardeo por parte de Rusia a esta instalación fue un crimen de guerra.
Anexiones rusas de territorio ucraniano
La gran movida que hizo el presidente Rusia en 2014, cuando anexó a Crimea a su territorio, tuvo réplicas en la actual guerra con Ucrania.
Nueve años atrás, el presidente Putin quiso recuperar la península para facilitar la salida de sus fuerzas navales al Mar Negro y por sus reservas de gas.
En ese momento, uno de los grandes argumentos del mandatario fue que la población de Crimea tenía más afinidad, conexión y cultura con Rusia que con Ucrania.
Los datos oficiales de 2014 muestran que el 60% de los ciudadanos eran de origen ruso y solo el 25% de la región era de origen étnico ucraniano, muchos eran ruso parlantes y compartían los ideales de Vladimir Putin.
La anexión se calificó como ilegal por la comunidad internacional y llegó con paquetes de sanciones económicas para Moscú.
Ocho años más tarde de aquella anexión, llegó otro decreto ruso para hacerse con cuatro regiones importantes del este de Ucrania. El 27 de septiembre de 2022 Vladimir Putin celebró de forma pública el referendo de anexión las regiones separatistas de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporizhia.
El 5 de octubre del mismo año, Putin firmó cuatro leyes constitucionales sobre la entrada de las repúblicas populares a la Federación de Rusia, una medida que fijó la lengua rusa como idioma oficial de las cuatro regiones, aunque no restringe el ucraniano, y establece el uso del rublo como moneda nacional.
Con Reuters y AP.