Las carteras clave de Defensa y Asuntos Exteriores del gobierno de transición sirio recaen en figuras prominentes de la insurgencia que derrocó a Bashar al-Assad hace casi dos semanas, encargadas de reestructurar el ejército del país y establecer "relaciones internacionales que traigan paz y estabilidad".

Los nuevos gobernantes de Siria nombraron a Murhaf Abu Qasra, figura destacada de la insurgencia que derrocó a Bashar al-Assad, ministro de Defensa del Gobierno interino, informó el sábado una fuente oficial.

Abu Qasra, también conocido por el nombre de guerra Abu Hassan 600, es una figura de alto rango en el grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham (HTS), que dirigió la campaña que derrocó a Assad este mes.

Dirigió numerosas operaciones militares durante la revolución siria, según la fuente.

El líder de facto de Siria, Ahmed al-Sharaa, discutió "la forma de la institución militar en la nueva Siria" durante una reunión con facciones armadas el sábado, informó la agencia estatal de noticias SANA.

Durante la reunión, Abu Qasra se sentó junto a Sharaa, también conocido por el nombre de guerra de Abu Mohammed al-Golani, según mostraron fotos publicadas por SANA.

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El primer ministro Mohammed al-Bashir dijo esta semana que el ministerio de Defensa se reestructuraría utilizando antiguas facciones rebeldes y oficiales que desertaron del ejército de Assad.

Bashir, que anteriormente dirigió una administración afiliada a HTS en la provincia noroccidental de Idlib, ha dicho que dirigirá un gobierno de transición de tres meses. La nueva administración no ha declarado sus planes para después.

Anteriormente, el sábado, la Comandancia General en el poder nombró a Asaad Hassan al-Shibani ministro de Asuntos Exteriores, según SANA. Una fuente de la nueva administración declaró a Reuters que este paso "responde a las aspiraciones del pueblo sirio de establecer relaciones internacionales que aporten paz y estabilidad".

Shibani, de 37 años y licenciado por la Universidad de Damasco, dirigió anteriormente el departamento político del gobierno rebelde de Idlib, según la Comandancia General.

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El grupo de Sharaa formaba parte de Al Qaeda hasta que rompió lazos en 2016. Había estado confinado en Idlib durante años hasta que pasó a la ofensiva a finales de noviembre, arrasando las ciudades del oeste de Siria y llegando a Damasco mientras el ejército se deshacía.

Sharaa se ha reunido esta semana con varios enviados internacionales. Ha declarado que su principal objetivo es la reconstrucción y lograr el desarrollo económico y que no está interesado en participar en nuevos conflictos.

Los rebeldes sirios tomaron el control de Damasco el 8 de diciembre, obligando a Assad a huir tras más de 13 años de guerra civil y poniendo fin a décadas de gobierno de su familia.

Washington designó a Sharaa terrorista en 2013, diciendo que Al Qaeda en Irak le había encargado derrocar el gobierno de Assad y establecer el sistema legal islámico en Siria. Funcionarios estadounidenses dijeron el viernes que Washington retirará una recompensa de 10 millones de dólares por su cabeza.

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La guerra ha matado a cientos de miles de personas, ha provocado una de las mayores crisis de refugiados de los tiempos modernos y ha dejado ciudades bombardeadas hasta los escombros y la economía vaciada por las sanciones mundiales.

Este artículo es una adaptación de su original en inglés