Aunque la política exterior se considera tradicionalmente "competencia del presidente", figura en los programas de los partidos políticos que se presentan a las elecciones legislativas de Francia, que tendrán lugar el 30 de junio y 7 de julio. Veamos las propuestas del izquierdista Nuevo Frente Popular, de la coalición oficialista Juntos y de la ultraderecha de Agrupación Nacional (RN).
Es difícil elaborar propuestas sobre la integración europea y la política exterior cuando el puesto de presidente de la República no está en juego. Sin embargo, el Nuevo Frente Popular (de izquierdas) presenta una visión y muestra claramente sus colores, ya sea sobre Europa, la guerra en Ucrania o Gaza.
En cambio, la coalición oficialista Ensemble (Juntos) ha hecho lo mínimo en este ámbito, limitándose a reiterar la política actual del jefe de Estado, Emmanuel Macron.
En cuanto a la ultraderechista Agrupación Nacional, hasta que se publique su programa el lunes 24 de junio, hay que conformarse con las declaraciones de Jordan Bardella y de su líder, Marine Le Pen.
Leer tambiénDisolución, cohabitación, negociación: el glosario de las legislativas francesas
France 24 detalla las medidas propuestas por estas tres familias políticas.
Izquierda: "promover la diplomacia francesa al servicio de la paz"
En cuanto a Europa, la coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP) dice rechazar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, la ley de competencia "cuando atenta contra los servicios públicos" y los acuerdos de libre comercio.
Tiene la intención de proponer un pacto europeo para el clima y la emergencia social, una reforma de la Política Agrícola Común (PAC), la instauración de un proteccionismo ecológico y social en las fronteras europeas y la adopción de un mecanismo de armonización social al alza entre los Estados para acabar con las prácticas de competencia desleal social y fiscal.
El frente izquierdista también quiere reindustrializar Europa, introducir una regla verde para dar prioridad a las inversiones ecológicas, gravar a los más ricos a escala europea para aumentar los recursos propios del presupuesto de la UE y generalizar la imposición de los superbeneficios a escala europea, cambiar el derecho de competencia en Europa para garantizar el derecho de monopolio público a nivel nacional, y pasar a la mayoría cualificada en cuestiones fiscales, es decir, exigir el voto de al menos el 55% de los Estados miembros que representen al menos el 65% de la población de la Unión Europea en lugar de la unanimidad.
Son medidas que no dependen únicamente de Francia y para las que tendrán que convencer a sus socios europeos.
En política exterior, el programa de la alianza de izquierdas hace hincapié en el fomento de la paz, ya sea en Ucrania o en Gaza. Francia Insumisa (LFI), el Partido Socialista (PS), Los Ecologistas y el Partido Comunista (PCF) se comprometen a "defender sin fisuras la soberanía y la libertad del pueblo ucraniano y la integridad de sus fronteras, mediante la entrega de las armas necesarias, la anulación de su deuda externa, la confiscación de los bienes de los oligarcas que contribuyen al esfuerzo bélico ruso en el marco permitido por el derecho internacional o el envío de cascos azules para asegurar las centrales nucleares". El objetivo es claro: "derrotar la guerra de agresión emprendida por Vladimir Putin".
Sobre Gaza, el Nuevo Frente Popular quiere "actuar por un alto el fuego inmediato" y "por una paz justa y duradera", postura que describe como una ruptura con "el apoyo culpable" del Ejecutivo francés "al gobierno supremacista de extrema derecha de Netanyahu".
La izquierda promete actuar en favor de la liberación de los rehenes de Hamás y de los presos políticos palestinos, apoyar a la Corte Penal Internacional (CPI) en su proceso contra los dirigentes de Hamás y del gobierno de Netanyahu, reconocer "inmediatamente" un Estado palestino junto con el Estado de Israel sobre la base de las resoluciones de la ONU, declarar un embargo sobre el suministro de armas a Israel, imponer sanciones al gobierno de Benjamin Netanyahu "mientras no respete el derecho internacional en Gaza y Cisjordania", pedir la suspensión del Acuerdo de Asociación Unión Europea-Israel, permitir la celebración de elecciones libres bajo supervisión internacional "para que los palestinos puedan decidir su propio destino" y hacer respetar la soberanía del Líbano.
Por último, el Nuevo Frente Popular quiere promover lo que llama el "procomún mundial", reconociendo el delito de ecocidio y defendiendo el levantamiento de las patentes sobre las vacunas y los medios médicos para luchar contra las pandemias.
Leer tambiénLegislativas en Francia: lo que proponen los partidos sobre inmigración y laicismo
Oficialismo: "que Francia brille en el mundo"
La coalición oficialista no propone nada nuevo sobre Europa, ni sobre política exterior. En cuanto a la Unión Europea, solo se menciona la reforma del derecho de asilo recientemente aprobada por el Parlamento Europeo y la coalición promete que pronto se abrirán centros en las fronteras de Europa para "examinar la situación de los migrantes antes de que lleguen al suelo" francés.
Por lo demás, promete permanecer en la OTAN y mantener la disuasión nuclear, duplicando el presupuesto de las Fuerzas Armadas de aquí a 2030, como prevé la ley de programación militar, "para hacer frente a las nuevas amenazas y garantizar que Francia y su voz única sean respetadas en el concierto de las naciones".
Ensemble (Juntos) se propone también mantener una diplomacia que "permanecerá al servicio de los compatriotas en Francia y en el extranjero", en particular con "la simplificación y la desmaterialización de los trámites del estado civil de los franceses en el extranjero".
Por último, el programa de la coalición de Macron toca brevemente la guerra de Ucrania para reafirmar su apoyo "frente a la agresión", mientras que la guerra de Gaza no se menciona en absoluto. Sin embargo, Emmanuel Macron ya ha dejado claro que considera que el reconocimiento de un Estado palestino "no es razonable ahora".
Ultraderecha: apoyo abierto a Ucrania e Israel y a una "alianza europea de naciones".
A la espera de su programa completo para las elecciones legislativas anticipadas, los puntos relativos a la política exterior de la ultraderechista Agrupación Nacional (RN) son desiguales.
La RN afirma apoyar a Ucrania frente a una invasión rusa, que condena, pero el programa de Marine Le Pen, a pesar de que Vladimir Putin ya había lanzado hostilidades contra Kiev, preveía "el diálogo con Rusia sobre las grandes cuestiones comunes", además de la cooperación militar. Sin duda, el tema está siendo revisado: el folleto temático sobre cuestiones de defensa ha sido retirado de la página web de RN en los últimos días.
Los vínculos entre el partido de extrema derecha y Rusia son bien conocidos: la campaña presidencial de Marine Le Pen en 2017 se financió gracias a un préstamo de un banco ruso y la hija de Jean-Marie Le Pen también fue recibida en el Kremlin por Vladimir Putin en marzo de 2017… pero Marine Le Pen se ha defendido de cualquier "tropismo ruso".
Sobre la guerra de Gaza, la RN defiende el apoyo a Israel y Marine Le Pen llegó a afirmar en la cadena LCI, el 29 de mayom que su partido "siempre había sido sionista".
"El Frente Nacional, históricamente, siempre ha estado a favor de la creación de un Estado judío", afirmó, limitándose a reconocer las relaciones "extremadamente difíciles" entre su padre, Jean-Marie Le Pen, y los judíos debido a sus numerosos comentarios antisemitas, que le valieron varias condenas judiciales.
Sobre Europa, Jordan Bardella, líder de RN, debería repetir lo que dijo durante la campaña electoral europea. El líder de la RN promovía una "alianza europea de naciones", que consiste en revisar los tratados europeos para eliminar muchos de los poderes que actualmente se confían a la UE, un proyecto al que se oponen los socios europeos de Francia. Dijo querer "rehabilitar la frontera como herramienta de protección y regulación" para acabar con el "coladero" hacia Europa.
Leer tambiénFrancia: el extremista Bardella dice que apoya a Ucrania, pero no enviaría misiles para atacar a Rusia
Dicho claramente, la RN quiere restablecer los controles fronterizos nacionales y restringir la libre circulación de personas dentro del espacio Schengen a los nacionales de los Estados miembros de la UE. La RN también quiere introducir una moratoria en la negociación de nuevos acuerdos de libre comercio y una prioridad nacional para la adjudicación de contratos públicos. Por último, Jordan Bardella se opone a cualquier ampliación de la Unión Europea.