Italia ganó su segunda Copa Davis consecutiva, la tercera en su palmarés, con la victoria del número 1 mundial Jannik Sinner sobre Tallon Griekspoor (40º); 7-6 (7-2) y 6-2, que situó el 2-0 definitivo en la final ante Países Bajos, este domingo en Málaga.

Sinner, que se va de la ciudad andaluza con cuatro victorias en cuatro partidos -una en dobles-, completó el trabajo iniciado en el primer turno por Matteo Berrettini (35º), implacable ante Botic van de Zandschulp (80º), 6-4 y 6-2 en una hora y 16 minutos.

Italia alcanza las tres Ensaladeras de Plata tras ganar en 2023, también en Málaga, y en 1976.

Países Bajos, revelación de la 'Final 8′ tras apear a España en cuartos el martes y propiciar la retirada de Rafa Nadal, jugó por primera vez la final del gran torneo de naciones, creado en 1900.

Sinner sudó más de lo previsible ante un Griekspoor duro de pelar en el primer set pero que se resquebrajó en el segundo para caer en una hora y 31 minutos.

El neerlandés, aplicado y dinámico en los peloteos en su puesta de largo, aguantó el careo a Sinner durante toda la primera manga. Incluso la llevó al 'tie-break', tras haber dispuesto de las dos únicas bolas de rotura registradas -no convertidas-.

Pero en la 'muerte súbita' apareció el colmillo del número 1, que abrió el fuego con un saque directo. En el polo opuesto Griekspoor pagaba los nervios con un par de errores no forzados que antes no había cometido para ceder en 50 minutos.

La segunda manga tuvo menos intriga. Sinner por fin tuvo su primera bola de rotura y la aprovechó, aunque Griekspoor le devolvió el 'break' inmediatamente (2-2).

El neerlandés definitivamente se había desordenado. Mezclaba golpes maestros que hacían levantar a la grada con más errores que le llevaron a conceder una nueva rotura.

Sinner no iba a desaprovechar regalos y su tercer 'break' le llevó al 5-2, antes de cerrar al servicio el duelo con su cuarta bola de partido.