La ofensiva israelí contra los militantes de Hamás en una Franja de Gaza devastada e inmersa en una crisis humanitaria sin precedentes cumple 15 meses, con más de 45.800 muertos palestinos y en medio del enésimo impulso en las negociaciones para una tregua que no termina de llegar.
Desde el comienzo de la ofensiva israelí sobre la Franja de Gaza el 7 de octubre de 2023, el balance tanto humano como de destrucción en el enclave palestino ha sido catastrófico.
En 15 meses, más de 45.800 palestinos han muerto y 11.200 están aún desaparecidos por los incesantes ataques israelíes, según las autoridades sanitarias gazatíes. La ofensiva militar de Israel ha herido también a más de 109.190 personas en la Franja de Gaza.
Dentro de los fallecidos, unos 17.800 son niños, así como 5.000 entre los más de 11.000 desaparecidos. Unos 35.000 menores se han quedado huérfanos y más de 1.400 familias han desaparecido completamente de los registros, con la muerte de todos sus miembros.
Además de las bombas israelíes, las bajas temperaturas invernales ya están haciendo estragos y han fallecido ocho personas por hipotermia, siete de ellos bebés con pocos días de vida. Desde el 7 de octubre de 2023, también han muerto unas 40 personas de hambre, la mayoría de ellos también bebés.
En 15 meses, el 90% de la población gazatí (alrededor de 1,9 millones de personas) ha sido desplazada de sus hogares. La mayoría de las personas está ahora en la denominada "zona humanitaria", pero no exenta de bombardeos, en Al-Mawasi, al sur del enclave palestino. Estas familias desplazadas y vulnerables viven en condiciones precarias, a menudo hacinadas en escuelas o campamentos provisionales.
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Dos tercios de los edificios destruidos o dañados
Ciudades enteras que han desaparecido del mapa con todos sus edificios en ruinas: en 15 meses de guerra, la infraestructura del enclave palestino ha quedado devastada.
Dos tercios de los edificios de la Franja de Gaza han quedado destruidos o dañados desde el comienzo de la guerra en octubre de 2023, según anunció Naciones Unidas a finales de septiembre.
Actualizando su evaluación de daños, el Centro de Satélites de la ONU (UNOSAT) afirmó que las imágenes de muy alta resolución recogidas los días 3 y 6 de septiembre mostraban un claro deterioro de la situación.
“Este 66% de edificios dañados en la Franja de Gaza corresponde a un total de 163.778 estructuras”, añadió. Estas “estructuras” incluyen todo tipo de construcciones, como carreteras principales, hospitales y escuelas.
De hecho, las escuelas de Gaza se han visto especialmente afectadas: más de 300 han sido destruidas o gravemente dañadas, privando a cientos de miles de niños de su derecho a la educación. UNICEF advirtió de que toda una generación corre el riesgo de perderse si no se realizan inversiones masivas para restaurar el sistema educativo.
Un sistema sanitario "al borde del colapso total"
El sistema educativo no es el único afectado por la ofensiva israelí: el sistema de salud de la Franja de Gaza está “al borde del colapso total” según alertó la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en un informe publicado el 31 de diciembre.
“La serie de mortíferos ataques israelíes contra hospitales en Gaza y sus alrededores, así como los combates asociados, han llevado al sistema de salud al borde del colapso total, con un efecto catastrófico en el acceso de los palestinos a la salud y la atención médica”, afirmó en un comunicado que acompaña al informe.
El informe también calificó de “vagas” las afirmaciones de Israel de que estos ataques estaban justificados por el hecho de que grupos armados palestinos estaban utilizando los edificios: “Hasta la fecha, la opinión pública no dispone de información suficiente para respaldar estas alegaciones, que siguen siendo vagas y generales y, en algunos casos, parecen contradecirse”.
En el norte de la Franja de Gaza, ya no queda ni un hospital operativo, después de que el Ejército ordenara la evacuación y asaltara el Kamal Adwan, el principal de la zona, deteniendo a más de 200 personas, incluido su director, el doctor Husam Abu Safiya, que sigue en paradero desconocido.
Además de las pérdidas humanas y materiales, la población de Gaza está sufriendo un profundo trauma psicológico. Los niños especialmente muestran síntomas de estrés postraumático, como pesadillas, miedo constante y dificultad para concentrarse. Aunque algunas organizaciones locales están ofreciendo programas de apoyo, su capacidad sigue siendo insuficiente ante la magnitud de las necesidades.
En cuanto a la alimentación de los residentes del enclave palestino, las agencias humanitarias de la ONU alertaron a finales de 2024 de que 133.000 personas sufren niveles "catastróficos" de inseguridad alimentaria, especialmente en el norte.
Los retos de la entrega de ayuda en la Franja de Gaza
El bloqueo israelí, combinado con severas restricciones en los pasos fronterizos, está dificultando seriamente la entrega de ayuda humanitaria. Las agencias internacionales de ayuda que trabajan para paliar la crisis humanitaria en Gaza han acusado con frecuencia a las fuerzas israelíes de obstaculizar o amenazar sus operaciones.
La ilustración más reciente viene de parte del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU, que declaró el lunes que las fuerzas israelíes habían abierto fuego contra uno de sus convoyes en el asediado enclave palestino de Gaza, en lo que calificó de “horrible incidente”.
La agencia declaró que el convoy de tres vehículos que transportaba a ocho miembros del personal desde el centro de Gaza hasta la ciudad de Gaza, en el norte, fue alcanzado por 16 balas cerca del puesto de control de Wadi Gaza el domingo 5 de enero, sin causar heridos pero inmovilizando el convoy.
Los vehículos estaban claramente señalizados y habían recibido previamente autorizaciones de seguridad de las autoridades israelíes, según un comunicado del PMA.
El ejército israelí aseguró que hizo todo lo posible para facilitar el traslado de la ayuda y dijo que estaba investigando lo sucedido. “Se ha revisado el incidente, se han aclarado los procedimientos operativos y se analizarán las conclusiones de la investigación”, afirmó en un comunicado.
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¿Se está acercando un alto el fuego?
Las conversaciones sobre una tregua en la Franja de Gaza prosiguen a nivel “técnico”, declaró este martes 7 de enero Qatar, que actúa como mediador entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás.
Las conversaciones entre los negociadores de ambas partes se han reanudado en los últimos días bajo la égida de mediadores qataríes y egipcios, con el Gobierno de Joe Biden intentando por última vez llegar a un acuerdo antes de que Donald Trump tome posesión en la Casa Blanca el 20 de enero.
Sin embargo, el reloj sigue corriendo hasta la toma de posesión del presidente electo de Estados Unidos, que ha prometido un “infierno” a Hamás si no libera antes de esa fecha a los rehenes que aún retiene.
Hamás repitió el martes que solo liberaría a los rehenes si Israel aceptaba poner fin a la guerra en Gaza y retirar todas sus tropas del enclave, como ha exigido desde el principio. El grupo palestino ha entregado ya una lista con los nombres de 34 de los secuestrados (sobre los 96 rehenes israelíes que siguen cautivos) que liberaría en una primera fase del acuerdo, incluidos dos niños, diez mujeres y 11 adultos mayores, aunque sin aclarar si están vivos o muertos.
Por su parte, Israel insiste en que la guerra no terminará hasta que todos los rehenes hayan sido liberados y Hamás haya sido desmantelado y apartado del poder.
A pesar de los intensos esfuerzos diplomáticos liderados por Qatar, Egipto y Estados Unidos, no se ha alcanzado ninguna tregua desde el alto el fuego de una semana de finales de noviembre de 2023, que supuso la liberación de 105 rehenes a cambio de 240 prisioneros palestinos retenidos por Israel.
Con Reuters, EFE y AP