Al menos 20 personas murieron y 450 más resultaron heridas en Líbano este miércoles 18 de septiembre debido a explosiones de equipos electrónicos. Tienen lugar un día después del ataque contra miembros del grupo chiita Hezbolá que dejó 12 muertos y cerca de 3.000 heridos y por el que la milicia culpa a Israel, que no se ha pronunciado al respecto. Sin embargo, en la jornada el Gobierno israelí anunció una "nueva fase de la guerra" que concentrará a las tropas israelíes en la frontera con Líbano.

Lo esencial: 

  • Dispositivos electrónicos explotaron a última hora de la tarde en el sur de Líbano y en suburbios de Beirut, matando al menos a 20personas, informaron fuentes de seguridad.

  • El martes, otras 12 personas murieron y casi 3.000 resultaron heridas cuando miles de 'beepers' utilizados por miembros de Hezbolá explotaron en distintas partes del país.
  • Tanto el Gobierno libanés como Hezbolá acusaron a Israel de estar detrás de un ataque coordinado contra el grupo, que ha prometido represalias y continuar ayudando a Hamás en Gaza.
  • El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió de un "grave riesgo" de escalda en el conflicto en Medio Oriente y planteó la hipótesis de que las explosiones sean un "ataque preventivo" previo a "una gran operación militar". 

  • El ministro de Defensa de Israel declaró el inicio de una "nueva fase" de guerra en la que el Ejército israelí se concentrará en la frontera con Líbano. Tel Aviv sigue sin pronunciarse sobre las explosiones.