Pese a los señalamientos de que se trataría de un proceso "inconstitucional", el presidente de El Salvador Nayib Bukele inscribió este 26 de junio su precandidatura en busca de la reelección en los comicios de 2024. Una opción habilitada por la rama judicial, pero que varios artículos de la Constitución del país prohíben. 

Nueve meses después de haber manifestado su deseo de seguir en el poder, Nayib Bukele da un paso más para su objetivo de lograr la reelección en El Salvador.

Así lo confirmó este 26 de junio el partido oficialista Nuevas Ideas (NI) en su cuenta de Twitter.

"Comunicamos al pueblo salvadoreño que el Presidente Nayib Bukele y el vicepresidente Félix Ulloa ya están inscritos como precandidatos para presidente y vicepresidente de la República de El Salvador, en el partido más grande de la historia" del país, señaló la bancada del mandatario.

Pese a las críticas de "inconstitucionalidad", debido a que varios artículos de la Carta Magna indican que la persona que haya ejercido la Presidencia no podrá "continuar en sus funciones ni un día más", a Bukele lo ampara una resolución lograda durante su Administración.

Esa medida modificó la antigua ley que inhabilitaba a los mandatarios a continuar en el poder durante dos periodos consecutivos.

La decisión fue tomada por jueces que fueron elegidos en procesos señalados como "irregulares" en la Asamblea Legislativa, debido a que destituyó a los anteriores magistrados constitucionalistas.

Antes de esta modificación, cualquier presidente debía esperar diez años antes de postularse en cualquier intento de reelección. 

Incluso, el mismo Bukele fue uno de los defensores de la idea de que un mandatario no debía mantenerse en el poder por períodos consecutivos.

En 2013, seis años antes de llegar al Ejecutivo, el ahora mandatario defendió públicamente en un medio nicaragüense que “ningún presidente de El Salvador podía ser reelegido para garantizar que una sola persona no se mantenga en el poder”.

 “La Constitución no permite que la misma persona sea presidente dos veces seguidas. Puede ser presidente 80 veces si quiere, pero no seguidas”, remarcaba Nayib Bukele en la entrevista televisada, cuando ejercía como alcalde de Nuevo Cuscatlán. 

Sin embargo, con la resolución de la Corte Suprema en 2021, ahora cualquier jefe de Estado de El Salvador puede pedir una licencia de seis meses antes del inicio del periodo presidencial. 

Una autorización que, en el caso de Bukele, lo obligaría a gobernar solo los primeros seis meses de su quinto año, por lo que debería apartarse de la Presidencia en enero de 2024.

Aunque el jefe de Estado cuenta con una alta popularidad entre la población salvadoreña, desde septiembre de 2021 se han registrado cerca de diez marchas en las que los ciudadanos han señalado al Ejecutivo de corrupción, violaciones de derechos humanos, represión a la libertad y abuso de poder.

Un escenario que contrasta con las encuestas recopiladas por distintos medios de comunicación, incluida la agencia AFP, que muestran que nueve de cada diez salvadoreños aprueban la gestión de Bukele. Sus seguidores argumentan que el líder político ha devuelto la seguridad a las calles tras declarar la "guerra" a las pandillas criminales, el año pasado.

Rechazo internacional y popularidad local

Nayib Bukele ha estado en las portadas de los medios de comunicación de varios países por sus polémicas decisiones y estrictas medidas que ha implementado desde que asumió el Ejecutivo en junio de 2019. 

Entre las más recordadas está la aprobación de la adopción de la criptomoneda Bitcoin como divisa de curso legal. También su denominada “guerra contra las pandillas”, bajo la cual las autoridades han llevado a cabo más de 52.500 detenciones de hombres señalados como delincuentes.

Pero Naciones Unidas indica que bajo esa política de seguridad se han registrado cerca de 6.500 denuncias de atropellos a los derechos humanos.

Todo enmarcado en un régimen de excepción que, según diversas organizaciones civiles, suspende derechos fundamentales para los salvadoreños y que se ha venido renovando desde marzo sin oposición del Legislativo, ya que el partido liderado por Bukele cuenta con la mayoría absoluta.

Sin embargo, muchos de quienes lo eligieron defienden y justifican sus tan criticados métodos, al señalar que son los medios que el país necesitaba para solucionar varias de sus problemáticas internas

Hoy, después de anunciar la inscripción de su precandidatura, se extienden los comentarios y publicaciones de apoyo a la gestión del mandatario. Muchos de sus simpatizantes aseguran que lo respaldarán en su búsqueda por ganar un segundo periodo presidencial.  

Con AFP, AP y EFE