El Gobierno de Bolivia anunció este sábado que declaró la "emergencia nacional" para agilizar la coordinación interna y la llegada de apoyo internacional para combatir los incendios forestales que hasta el momento han arrasado con 3,8 millones de hectáreas de bosques y pastizales, según datos oficiales.

El anuncio fue realizado por el ministro de Defensa, Edmundo Novillo, tras una reunión que sostuvo en La Paz junto a sus pares de Exteriores, Celinda Sosa; de Planificación de Desarrollo, Sergio Cusicanqui, y de Medio Ambiente y Agua, Alan Lisperguer, con embajadores acreditados en Bolivia.

"Como Gobierno nacional se ha decidido declarar la emergencia nacional y para eso estamos haciendo los trámites de la forma más inmediata posible", sostuvo Novillo.

El ministro explicó que esta declaración permitirá "tener una dinámica más ágil y rápida con los cooperantes" para que la ayuda internacional para combatir los incendios llegue "de forma más efectiva".

Internamente también agilizará la cooperación entre entidades estatales y con los gobiernos subnacionales para el combate del fuego y las atenciones de salud y ayuda humanitaria para las poblaciones y los bomberos que están trabajando en las zonas afectadas, agregó.

Entre los participantes en el encuentro, Novillo destacó la presencia de representantes de Naciones Unidas, la Unión Europea (UE) y países vecinos como Brasil, que manifestaron su "total predisposición" para atender los requerimientos presentados por Bolivia.

3,8 millones de hectáreas quemadas

Las necesidades bolivianas para combatir los incendios incluyen el envío de aeronaves, bomberos, equipamiento, expertos y ayuda humanitaria, entre otros, explicó el ministro y agregó que los embajadores harán las consultas correspondientes a sus gobiernos para atender estas solicitudes.

A su turno, el ministro Lisperguer detalló que hasta el momento se tiene reporte de 1,5 millones de hectáreas afectadas por el fuego en áreas boscosas y 2,3 millones en pastizales, para un total de 3,8 millones de hectáreas a nivel nacional.

Lisperguer precisó que actualmente hay 72 puntos de fuego activo en el país, de los que 64 se concentran en la región oriental de Santa Cruz, la más poblada y el motor económico de Bolivia.

También hay seis en la región amazónica de Beni, uno en la norteña Pando y uno en La Paz, agregó.

Según la autoridad, se trabaja para combatir el fuego en las áreas protegidas San Matías, Manuripi y Noel Kempff Mercado, esta última una de las principales reservas de Bolivia.

El ministro recordó que Santa Cruz se declaró en "emergencia" y Beni en situación de "desastre" por los incendios.

Las quemas controladas, en el centro de la problemática

Hace unos días, la fuerza opositora Comunidad Ciudadana (CC) pidió al presidente Luis Arce la declaración de "emergencia nacional" y cuestionó que las normas que permiten las quemas controladas o 'chaqueos' siguen vigentes.

En la víspera, Arce anunció la llegada de especialistas, brigadistas y bomberos de Brasil, Chile y Francia para apoyar el combate de los incendios en Bolivia.

Los 'chaqueos' se suelen realizar a mediados de año para habilitar los terrenos para la etapa de siembra o la crianza de ganado y son una de las principales causas de los incendios cuando escapan de control.

El efecto ha llegado también a ciudades como La Paz, Santa Cruz, Cochabamba o Cobija, que en los últimos días tienen sus cielos cubiertos por la humareda y reportan mala calidad del aire.

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