Las banderas francesas ondearon a media asta el lunes y se guardó un minuto de silencio a las 11 de la mañana en el marco de un día de luto nacional por las víctimas del ciclón Chido en Mayotte. Sobre el terreno, prosiguen los esfuerzos para restablecer los servicios esenciales y reconstruir el archipiélago. Al menos 35 personas murieron y unas 2.500 resultaron heridas, según un balance provisional.

Francia guarda este lunes un día de luto nacional fijado por el presidente Emmanuel Macron en solidaridad con Mayotte, azotada hace diez días por el ciclón Chido, que devastó el archipiélago y causó la muerte de al menos 35 personas.

Para este día de "luto nacional", el Jefe del Estado, que visitó la semana pasada este territorio francés del océano Índico, anunció que las banderas ondearían a media asta. A las 11 de la mañana, hora local, se guardó un minuto de silencio, especialmente en los servicios públicos.

El presidente francés también rindió homenaje a las víctimas del ciclón desde el patio del Elíseo. "A los mahoríes", publicó el Elíseo en X.

El Primer Ministro François Bayrou guardó un minuto de silencio desde Matignon.

El 14 de diciembre, el ciclón más devastador que ha azotado Mayotte en 90 años destruyó todas las viviendas precarias. También causó daños colosales en el departamento más pobre de Francia, donde aún se están llevando a cabo tareas de socorro para restablecer servicios esenciales como el agua, la electricidad y las redes de comunicaciones.

"El 90% de Mayotte ha quedado destruida, el 90% de los hogares ya no tienen techo. No tenemos agua, ni comida, y la ayuda sigue luchando por llegar a las zonas", declaró Estelle Youssouffa, diputada de Mayotte, a la radio pública France Inter el lunes por la mañana.

"Estoy con nuestra gente, que no tiene agua y no ha visto ninguna ayuda. Pido desesperadamente el envío del ejército para intentar evitar que la situación caiga en la anarquía. Estamos saqueando las pocas casas que ya no tienen techo. No ha habido suficiente ayuda, no hay suficiente ayuda", prosiguió, declarándose “profundamente indignada” por una clase política cuya “obsesión general” es “cambiar” de ministros en un momento en que la isla “está en una gran angustia humanitaria”.

"De hecho, Mayotte nos importa poco. Y eso, francamente, es grave", dijo la diputada, embargada por la emoción.

Misión de búsqueda de víctimas

El balance provisional de esta catástrofe natural es de 35 muertos y unos 2.500 heridos, pero las autoridades, que temen que el número de víctimas sea mayor, han puesto en marcha una misión de búsqueda.

En Mozambique, el ciclón causó la muerte de al menos 94 personas, según las autoridades locales. En Malawi, mató a 13 personas.

En Mayotte, donde sigue en vigor un toque de queda nocturno, Emmanuel Macron también prometió una ley especial para "reconstruir Mayotte" y "acabar" con los barrios de chabolas, un proceso que podría durar dos años según el nuevo primer ministro François Bayrou.

 

Con AFP.