Cuba inicia de forma “gradual” una ola masiva de excarcelaciones, cifrada en centenares de personas “sancionadas por delitos diversos”, un día después de que el Gobierno saliente de EE.UU. anunciara su decisión de sacar a Cuba de la lista de países que patrocinan el terrorismo. Entre los excarcelados habría personas que participaron en las protestas del 11-J.
Un total de 553 presos cubanos volverán a ver la luz un día después del anuncio de Washington de sacar a La Habana de su lista de países que patrocinan el terrorismo.
Las autoridades cubanas aclararon, no obstante que las 553 personas que saldrán de las cárceles de la isla no han sido ni indultadas ni amnistiadas -sino, técnicamente, excarceladas- y que, por tanto, "pueden regresar a la prisión" si no cumplen una serie de "requisitos", como una "buena conducta".
En declaraciones a la televisión estatal, Maricela Sosa, vicepresidenta del Tribunal Supremo Popular (TSP), advirtió de que si las personas que obtendrán el beneficio "progresivamente" no "cumplen con esas obligaciones", el tribunal que les condenó tiene la facultad de revocarles esta medida y "que regresen al centro penitenciario".
Cuba aseguró que se trata de personas "sancionadas por delitos diversos" y avanzó que serían excarcelados "gradualmente", sin más detalles. Pero muchos de ellos son considerados presos políticos, según ONG y activistas.
El Gobierno cubano consideró el anuncio de Washington una "decisión en la dirección correcta", aunque aclaró que a su juicio es un paso "muy restringido", pues siguen estando en vigor múltiples sanciones económicas.
Según la Casa Blanca, las liberaciones comenzarán "en relativamente poco tiempo" y entre los presos seleccionados habría personas que participaron en las protestas antigubernamentales del 11 de julio de 2021, las mayores en décadas en Cuba.
Entre las primeras personas que han salido de prisión se encuentran Dariel Cruz García, Lisdiany Rodríguez Isaac y Donaida Pérez Paseiro, considerados presos políticos, según las ONG.
Según el relato de familiares de varios reclusos, fueron convocados sin explicación a primera hora de la mañana de este miércoles a centros penitenciarios tras el anuncio del Gobierno sobre las liberaciones.
La última excarcelación se produjo en 2019, cuando las autoridades indultaron a 2.604 reclusos. La anterior se produjo en 2015, cuando un total de 3.522 presos fueron excarcelados como "gesto humanitario" ante la visita del papa Francisco.
Y aunque el optimismo se haya instalado en las calles de La Habana, las principales ONG que registran presos por motivos políticos en la isla recibieron con escepticismo el anuncio del Gobierno cubano: el número de presos políticos que manejan es muy superior a la cifra anunciada por el Estado.
Fuera de la lista
La excarcelación –que no se denomina 'liberación', al no considerarlos presos políticos– llegó después de que Estados Unidos decidiera sacar a Cuba de la lista de países que patrocinan el terrorismo.
Ser parte de la negra lista incluye la prohibición de venta de armas a ese país, un mayor control a sus exportaciones, restricciones en la ayuda exterior, mayores requisitos para los visados y la congelación práctica de gran parte de su actividad financiera en el exterior.
Formar parte de esa clasificación contribuyó a un empeoramiento de las finanzas nacionales, a la inflación y al déficit.
Donald Trump, el reelegido presidente estadounidense que tomará posesión el 20 de enero, fue el hombre que puso a Cuba en esa lista en 2017. Por ello, con su vuelta al Despacho Oval, La Habana es pesimista.
En el país no se descarta que el nuevo Gobierno estadounidense pueda revertir las medidas. A ello, se le suma el nuevo secretario de Estado de Trump, Marco Rubio: el cubanoestadounidense es un ferviente defensor de la línea dura con la isla.
Con EFE y medios locales