El énfasis que ha puesto la administración del presidente Luis Abinader en la administración austera y transparente de los dineros del contribuyente y de poner atención a la buena gestión de los recursos en los gobiernos municipales, viene a retomar una visión de trabajo que hace 43 años empezó su padre, el doctor Rafael Abinader (1929-2018).
En efecto, en el año 1979, cuando el doctor Rafael Abinader ejercía la función de Contralor General de la República, dispuso de un programa de auditorías que abarcaban a los 116 ayuntamientos con que entonces contaba la República Dominicana, que incluían desde los grandes municipios hasta los distritos municipales.
En esa ocasión, Rafael Abinader, al instruir a su equipo de trabajo dijo:
"Ustedes no deben de limitarse a la observación de documentos, sino que también tienen que poner atención al uso de las distintas partidas presupuestarias" (periódico La Noticia, 7 de agosto de 1979, página 13).
El empeño puesto por el entonces Contralor General de la República no se limitó al Gobierno central, como lo evidencian los archivos oficiales.
Ahora, 43 años después, su hijo Luis Abinader, dede la Presidencia de la República asume el mismo empeño por la transparencia. Esta visión de gestión pública no solo se ha evidenciado con el apoyo dado a la Procuraduría General de la República, en la persona de Miriam Germán Brito, sino con el fortalecimiento de la Liga Municipal Dominicana, la Dirección General de Compras y Contrataciones y de la Cámara de Cuentas de la República Dominicana.
El día 11 de este mes el presidente Abinader informó que dispuso la inversión de 4 mil millones de pesos en municipios pequeños y distritos municipales, a los cuales se les mantuvo relegados en las asignaciones de los recursos, en violación a lo que ordena la Ley-176-07.
Los recursos se canalizan a través del nuevo Programa de Apoyo a los Gobiernos Locales del Gobierno y la Liga Municipal Dominicana (LMD).
Tal como explicó el secretario general de la Liga Municipal Dominicana Víctor D´Aza, las inversiones se ceñirán a la planificación y ningun autoridad municipal podrá utilizar los recursos para otros fines, además de que se exigirá estricto cumplimiento de la Ley 340-06 de Compras y Contrataciones Públicas.
En la presente gestión de la Dirección General de Compras y Contrataciones Públicas, que dirige el abogado especialista en transparencia Carlos Pimentel, se ha puesto atención a la administración de los fondos públicos responsabilidad de los gobiernos municipales.
En varias alcaldías, por ejemplo de la de San Pedro de Macorís, se ha dispuesto la eliminación de contratos que no cumplen con las exigencias de la administración transparente y de las licitaciones y concursos para la compra de bienes y servicios.
En gran medida, el doctor José Rafael Abinader, padre del presidente Luis Abinader, fue un visionario al asumir desde la Contraloría General la responsabilidad de velar por el uso correcto de los dineros del pueblo dominicano que se administran desde los gobiernos municipales.
Y lo más relevante es que el doctor Rafael Abinader fue un político y un hombre coherente. Aunque ocupó varias funciones púbicas y fue Senador, nadie nunca pudo señalarlo o vincularlo con prácticas reñidas con la ética o contrarias a las leyes.
