El famoso cabaret parisino del Lido, uno de los símbolos de la noche de la ciudad, va a sufrir una importante transformación que lo convertirá en una sala de espectáculos, lo que puede marcar un cambio profundo en la noche de la ciudad.

El nuevo propietario del cabaret, el grupo hotelero francés Accor, anunció que el proyecto se implantará en los próximos meses y que supondrá la supresión de 157 de los actuales 184 empleos del local, según detalló en un comunicado.

"El Lido sufre desde hace diez años un deterioro de su atractivo y un descenso continuado de su asistencia", señaló la nota, que afirmó que "el modelo de cena-espectáculo ya no encuentra público".

Las pérdidas acumuladas en el último decenio ascienden a 80 millones de euros, con una situación agravada por las huelgas y los cierres obligados por la pandemia, añade el comunicado.

Agrega que el local que salga del Lido buscará "conquistar nuevos públicos gracias a una nueva línea artística ambiciosa" a fin de intentar devolverlo "a su lugar en el tablero cultural parisino, nacional e internacional".

El fin de la mítica enseña del número 116 de los Campos Elíseos apunta también a un cambio más profundo en el modelo de un sector del turismo tradicional parisino, donde los tradicionales cabarets de revista parecen cada vez más desfasados y fuera del gusto de las nuevas generaciones.

"Es una pena, porque el alma de la noche parisina se está extinguiendo y es una catástrofe", lamentó David Zenouda, presidente a la asociación sectorial UMIH Nuit Paris, en declaraciones al canal BFM-TV.

Fundado en 1946, justo tras la Segunda Guerra Mundial, el Lido fue junto con el Moulin Rouge y el Crazy Horse uno de los grandes cabaret de la capital. Su último espectáculo, "Paris Merveilles", fue estrenado en 2015.

Accor compró en diciembre pasado la empresa propietaria del Lido, que recibió durante la pandemia 700.000 euros del Estado- según BFM-, dentro de las ayudas públicas a las empresas cerradas por los confinamientos.