La falta de acceso a servicios básicos como agua potable, internet, vivienda, educación, salud y energía son solo algunas de las brechas estructurales de la realidad socioeconómica de las provincias fronterizas del país y que obstaculizan su desarrollo.

Pedernales, Independencia, Elías Piña, Bahoruco, Dajabón, Monte Cristi y Santiago Rodríguez, registran el 65 % de la población en niveles socioeconómicos bajo y muy bajo, superior al 36 % registrado a nivel nacional.

De acuerdo con el Diagnóstico de las brechas estructurales de la zona fronteriza presentado por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, se identificaron 14 brechas o principales limitantes a mediano y largo plazo que evidencian el regazo de estas provincias respecto al resto del país.

14 brechas estructurales de la zona fronteriza: institucional, educación, salud, pobreza, acceso a servicios básicos, productividad, acceso a financiamiento, capital humano, conectividad, energía, agua, conectividad digital, ambiente y riesgos.

El diagnostico crítica que en más de 20 años de vigencia que tuvo la Ley 28-01 para crear una Zona Especial de Desarrollo Fronterizo no generó los resultados esperados, con muy bajo impacto en el valor agregado y el empleo. “Actualmente, solo están en operación alrededor de 80 empresas bajo este régimen, de las cuales solo ocho se localizan en las provincias fronterizas de la región suroeste, y ninguna de ellas en Pedernales”, apunta.

En 2018, según el Sistema Único de Beneficiarios (Siuben) en la zona fronteriza existían 6,472 viviendas sin electricidad, el 18 % del total levantado en el territorio nacional, tomando en cuenta que estas provincias solo tienen el 6 % del total de viviendas levantadas en el país por esta entidad.

Acceso a servicios básicos

Elías Piña es la provincia de mayor incidencia de personas en los grupos socioeconómicos inferiores, donde ocho de cada 10 familias (78.2 %) se encuentra en los grupos «bajo» o «muy bajo». Le siguen Bahoruco e Independencia, con un 72.8 % y un 72.0 % respectivamente. Mientras que la provincia con menor cantidad de personas en condiciones socioeconómicas «bajas» o «muy bajas» es Santiago Rodríguez, con 43.4 %.

En cuanto al agua potable y saneamiento, la investigación muestra que en las provincias fronterizas la población se suple por acueductos en el patio de las viviendas (45.8 %), dentro de las casas (37.3 %), uso de llave pública o de otra vivienda y las fuentes de agua naturales (6.9 %)

El promedio nacional indica un nivel del acceso del 54.0 % de hogares con fuente de agua dentro de la vivienda, 19.0 % uso del acueducto en el patio y el 15.1 % utiliza alguna fuente de agua natural para uso doméstico.

Pedernales y Elías Piña son los que tienen menor acceso a agua potable dentro del hogar con un 84% y 82% respectivamente, seguido de Independencia y Bahoruco, ambas con 79% de las viviendas sin el servicio.

En la zona fronteriza el 90.3 % de los hogares tiene energía eléctrica (98.0% a nivel nacional), siendo Santiago Rodríguez la provincia con mayor número de viviendas con alumbrado eléctrico (96.1 %), seguido de Bahoruco, con un 92.7 %. En cambio, el acceso en Elías Piña y Pedernales asciende solo a un 79 % y 83.1 %, respectivamente.

Esto quiere decir que en Elías Piña, el 21 % de las casas no tienen energía y el 17 % en Pedernales.

Estrategia del gobierno

El Ministerio de Economía a través de la Estrategia de Desarrollo para la Zona Fronteriza (Mi Frontera RD) ha asegurado que busca implementar políticas públicas focalizadas para revertir la situación de vulnerabilidad de las provincias fronterizas.

La entidad sostiene que aunque la nueva Ley 12-21 garantiza por 30 años el acceso a un régimen tributario especial para las empresas beneficiarias localizadas en la zona fronteriza, los incentivos fiscales son una condición necesaria, pero no suficiente, por lo cual se requiere complementar con un instrumento para el desarrollo integral.

Miguel Ceara Hatton, ministro de Economía, manifestó que visualizan la zona fronteriza al 2030 con tres polos regionales para el desarrollo: Frontera norte, el centro y frontera sur. Explicó que se proyecta la frontera norte (Dajabón, Santiago Rodríguez y Montecristi) orientada hacia el sector logístico, el rescate de la producción agrícola, el fomento de las cooperativas rurales y el fortalecimiento del sector ganadero y sus derivados.

En la frontera centro (Elías Piña) se plantea la consolidación del sector agropecuario, el desarrollo agroindustrial, el fomento del comercio transfronterizo y el impulso a las cooperativas rurales.

Mientras que  la frontera sur se proyecta hacia el turismo sostenible, una economía sustentada en las Mipymes y las cooperativas rurales, la industrialización agrícola para impulsar las exportaciones y consolidar un comercio transfronterizo.

Entre las propuestas están dotar de energía, agua, Internet y remozamiento de viviendas unas 50 comunidades en la zona fronteriza más pobres y con el Banco Agrícola un programa de identificación de unidades productivas con potencial para financiamiento diferenciado.