El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este viernes con un descenso del 1,2 % y se situaba en 91,73 dólares el barril al final de una semana volátil.
A las 9.05 hora local (14.05 GMT) en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del WTI para entrega en abril recortaban 1,08 dólares respecto al cierre de la jornada anterior.
El petróleo de referencia estadounidense se disparó ayer jueves hasta rozar los 100 dólares el barril en las horas siguientes al inicio de la invasión rusa de Ucrania, pero después siguió una tendencia descendente.
Los mercados, sobre todo europeos, reaccionaron inicialmente con aversión al riesgo a la intervención militar ordenada en Ucrania por el presidente ruso, Vladimir Putin, que sigue avanzando hacia la capital.
No obstante, la volatilidad disminuyó después de la nueva batería de sanciones económicas contra Rusia anunciada por la Casa Blanca, que afectan a sus sectores de la banca, la tecnología y el espacio aéreo.
Según los analistas, las severas penalizaciones de EE.UU. y otros países occidentales excluyen las exportaciones de petróleo rusas, por lo que los mercados energéticos están ajustando el precio a ese "límite".
"Adicionalmente, el presidente (de EE.UU.) Biden ha dicho que está en camino una reducción global coordinada de (reservas estratégicas de petróleo), lo que añade otro factor adverso", indicó Jeffrey Halley, de la firma Oanda.
Por otra parte, los operadores están atentos a las negociaciones para salvar el pacto nuclear con Irán, que parecen situarse en su tramo final y, de tener éxito, podrían desembocar en el retorno del crudo iraní.
El precio del WTI se ha revalorizado un 22 % desde que empezó el año, presionado en buena parte por la creciente demanda de combustibles a medida que se supera la crisis del la covid-19 y la oferta ajustada.