El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este viernes casi plano, con una ligera bajada del 0,28 %, hasta 105,72 dólares el barril, y se encaminaba a cerrar a la baja una semana marcada por la volatilidad fruto de la guerra en Ucrania.
A las 9.05 hora de Nueva York (14.05 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en abril perdían 30 centavos con respecto al cierre anterior.
El crudo de referencia en Estados Unidos iniciaba la sesión casi sin cambios, en contraste con lo que ha sido una semana marcada por los vaivenes como consecuencia del conflicto ucraniano y la amplia batería de sanciones desplegada por Occidente, incluido el veto al petróleo ruso aprobado por Washington.
Hace siete días, el WTI había cerrado en 115,68 dólares tras la fuerte subida que vivió con el estallido de la guerra, una tendencia que continuó durante los primeros compases de esta semana, que llevaron a que el barril cerrase por encima de los 123 dólares al cierre del pasado martes, tocando niveles no vistos desde 2008.
Tras una espectacular caída de más del 12 % el miércoles, el crudo de Texas parece haberse estabilizado relativamente ante la expectativa de que varios países productores puedan aumentar el suministro.
La incertidumbre, en todo caso, sigue dominando el mercado y los inversores siguen muy pendientes de la posibilidad de sanciones europeas al petróleo ruso, lo que tendría un impacto mucho mayor que las ya adoptadas por EE.UU.