Hace 12 años, la vida de Lenin era muy diferente a la de ahora. A veces solo tenía 50 pesos para cenar junto a su esposa.

La pareja se había embarcado en su primer proyecto en común, y aunque el entusiasmo de emprender y el deseo de salir adelante los motivaba, hubo momentos en que pensaron desistir, precisamente por la situación económica en la que se encontraban.

"Si te soy sincero, pasamos hasta hambre. Nos vimos en situaciones difíciles. Muchas veces lo que teníamos eran 50 pesos en la noche para comer. Emprender cuesta, pero nosotros creíamos en lo que estábamos haciendo", comenta el joven de 35 años a Acento.

A la situación financiera se unían los “consejos” no solicitados de los familiares que les sugerían emplearse, en vez de continuar con su iniciativa, al que hoy llaman Proyecto Midas, una agencia publicitaria de la que se sienten muy orgullosos.

El inicio

La historia de Lenin Salomón Ramírez Mora se remonta a cuando, con tan solo 15 años, decidió emprender con su primer negocio: un centro de internet que instaló en su casa con un pequeño préstamo que le hizo su padre. Desde muy joven, Lenin sintió el deseo de emprender, de trabajar y así generar su propio dinero.

El centro de internet fue prosperando y luego trasladó parte del mismo a una universidad propiedad de un conocido, en donde brindaba servicios de fotocopias a los estudiantes.

"Empecé digitando en mi casa, y veía que era una demanda muy grande, y ahí entonces le pedí un préstamo a mi papá y él me prestó 17 mil pesos para comprar los equipos y puse un centro de internet. Eran tablas y computadoras, y una vitrina de fantasía, y puse el centro con eso", precisa.

Rápidamente, el negocio, que combinaba con sus estudios de ingeniería en la universidad, creció y se convirtió en papelería y centro de digitación.

"Un amigo compañero de universidad me ofreció poner la papelería en la universidad de su padre. Entonces dividí el negocio en dos, y llevé la fotocopiadora en la universidad y lo demás en el centro de digitación. Impresión y copia en la universidad. De ahí el negocio creció rapidísimo, como vieron que yo era muy responsable, me dieron la cafetería. Tenía el centro de internet y la cafetería", señala.

¿Cómo nace Proyecto Midas?

Lenin narra que, luego de varios años con el negocio del centro de internet, descubrió lo que era su verdadera pasión, la multimedia, y decidió estudiarla en el Instituto Tecnológico de Las Américas (ITLA).

Así, el joven lleno de sueños se arriesgó nuevamente y abandonó su primer negocio para iniciar lo que hoy llama Proyecto Midas, el cual ha levantado contra viento y marea, junto a su esposa Katherine Pérez.

"El negocio (Proyecto Midas) lo iniciamos hace unos 12 años. Comenzamos como pinito, con una idea, no comenzamos con nada. Yo estaba terminando de estudiar en el ITLA multimedia. También ingeniería en Intec, pero no la terminé porque no era mi pasión. La multimedia sí".

Lenin y Katherine han levantado su negocio a "puño y piedra"/ Mery Ann Escolástico.

Justo en ese momento conoció a Katherine, e iniciaron una relación que ha perdurado con el tiempo, y sobrepasado los peores momento.

"Estos años han sido una montaña rusa porque dejé el negocio y empecé desde cero. Dejé todo, no tenía ni un peso, no tenía nada. Arrancamos, nos sentamos en una mesa y dijimos este es el concepto del negocio, agarramos una carpeta, dijimos se va a llamar así…", precisa Lenin.

Sobre esto, Katherine rememora los momentos difíciles que han superado juntos y narra: "fue difícil arriesgarse, iniciar. Recuerdo que cuando pasábamos esos momentos de situaciones económicas yo lloraba muchísimo. Me encerraba a llorar y decía esto no se puede. Vamos a tener que hacer algo. Como la gente atacaba mucho con lo de buscar trabajo, yo se lo decía (a Lenin): vamos a buscar un trabajo, vamos a soltar. Esa presión…".

Pero resalta que nunca dejaron de intentarlo y que aprovechaban las festividades y días especiales para hacer venta de temporada.

"Viene la pelota, vamos a vender gorras, t-shirt… Siempre buscábamos como un plus para salir de abajo", señala Katherine al explicar que en ese momento ya tenían a su primera hija, por lo que la situación económica era aún más difícil.

El primer contrato 

Corría el año 2010 cuando, después de muchas vicisitudes, al fin la pareja tuvo un respiro al lograr el primer contrato de la publicitaria.

"Salimos con una carpeta en la mano con una propuesta y fuimos al primer cliente y nos dio un contrato buenísimo. El primer golpe", dice Lenin al explicar que se trató de un contrato de unos 180 mil pesos, que para ellos, en ese momento, "era un mundo".

Las contrataciones siguieron llegando y así Proyecto Midas se convirtió en un taller y agencia publicitaria bajo el concepto de 360 grados. Esto quiere decir que Lenin y su equipo, en total unos 14 empleados, crean las campañas desde cero.

Parte del equipo del Proyecto Midas/ Mery Ann Escolástico.

"Desde que el cliente concibe la idea hasta la propuesta final. Si necesita un estudio de mercado nosotros también lo aplicamos", explica el joven empresario.

Lenin aconseja a quienes quieren emprender 

Al preguntársele si cree en la suerte, Lenin dice que sí, pero advierte que solo cuando se está preparado. "Porque, por ejemplo, si yo hubiera ido a donde el primer cliente sin ningún tipo de preparación, no me iban a dar el contrato. Pero cuando nos citamos con el cliente, él entendía que nosotros teníamos la capacidad de resolver sus necesidades", precisa.

Por esta razón opina que, cuando se quiere emprender, lo primordial es estar preparado académicamente.

También, explica que se debe emprender con algo que apasione "porque es difícil si es algo que no te gusta. No va a funcionar. Y si es posible, que eso que te guste sea una necesidad no resuelta". Por ejemplo, cuando Lenin pensó que poner su negocio lo hizo en el área digital, que no era explotada todavía.

También sugiere tener mucha perseverancia, no desistir a pesar de los momentos difíciles que puedan presentarse y no desenfocarse del objetivo.

"Y que al principio no se fijen mucho en el dinero. Emprender es un sube y baja. Tienes dinero hoy y mañana no. Estos años han sido una montaña rusa", concluye.

¿Qué es lo más difícil?

Para Lenin, lo más difícil de emprender en República Dominicana es el tema del financiamiento. "Eso es horrible. Ejemplo, tu vas a un banco, que se supone después de la pandemia tienen muchas facilidades para emprendedores, y yo escucho una sola campana con mis colegas: me están pidiendo un sin número de cosas que por la misma pandemia no las puedo cumplir.  Incluso que el crédito lo tengas óptimo, cuando por la misma situación hubo personas que se les dañó".

Otro de los temas es que, cuando se logra un financiamiento a través de entidades bancarias, el monto aprobado es muy bajo y no alcanza para el objetivo del emprendedor.

Cuenta que muchas veces, junto a su esposa intentaron acceder a financiamientos y no se les permitía. "Por eso tuvimos que crear esto a puño y piedra. Fue peleado. Los equipos, por ejemplo, tienes que comprarlo prácticamente al descontado, entonces cuando vas, te dicen 'es que no has tomado crédito'. ¿Cómo voy a tener crédito si tú no me das un préstamo para comprar lo que necesito?", cuestiona.

Sobre este particular, en diciembre pasado, el Centro Latinoamericano de Innovación y Emprendimiento (Celiem) realizó un estudio, en el que se destaca que el 98% de las mipymes y personas consultadas se consideran emprendedoras y al 75% le gustaría emprender para ser su propio jefe. Sin embargo, esa misma cantidad opina que en el país no existen suficientes facilidades para emprender.

El estudio añade que solo se proyecta un 29 % de facilidades de acceso al financiamiento para emprendimientos nacientes.

Parte de los equipos del negocio de Lenin y Katherine. Foto: © Mery Ann Escolástico
Fecha:15/02/2022

Mensaje a jóvenes

"Veo muchos jóvenes que me da pena. Haciendo un sin número de cosas para tener dinero rápido. Jóvenes con muchísimo talento. A mí me duele cuando los veo haciendo disparate, que al final uno sabe que no va a terminar bien. Quiero decirles que de verdad hay más opciones de hacer dinero limpio", exhorta Lenin.

Explica que esas otras opciones quizás no sean fáciles y ameriten un gran esfuerzo, pero, por experiencia propia, sabe que luego se verán los resultados, que llegarán los beneficios, la libertad financiera.

"Hay más opciones de hacer dinero, por la vía legal. Decirle que aunque uno coja su lucha, después traerán más beneficios y quizás reconocimiento de la sociedad y de la familia. Que traten de trabajar, emprender y no se vayan por lo fácil", culmina diciendo.

Además de Proyecto Midas, Lenin y Katherine crearon la Fundación Por Santo Domingo Oeste, que lucha por la preservación del medioambiente y ofrece ayuda solidaria a moradores de este municipio.

Sobre la expansión del negocio, la pareja tiene planeado abrir una nueva sucursal de Proyecto Midas en una zona más céntrica, en el Distrito Nacional. La actual instalación del negocio está ubicada en Herrera, Santo Domingo Oeste.