Miguel Ceara Hatton es fundador del Partido Revolucionario Moderno. Fue el responsable de la elaboración del programa de gobierno que esa organización presentó al electorado para postular la candidatura presidencial de Luis Abinader.
Orlando Jorge Mera también fue fundador del PRM, y cuando ese partido comenzó a tener representación en la Junta Central Electoral, se convirtió en el abogado representante político de la organización en la JCE.
Cuando el PRM ganó las elecciones el presidente Abinader designó a Miguel Ceara Hatton como ministro de Economía, Planificación y Desarrollo. También designó a Orlando Jorge Mera ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Orlando heredó los apiarios en Santo Domingo de doña Asela Mera, su madre, y era un deportista consumado, como corredor y parte de un grupo de caminantes. Aunque pocos, sus vínculos con el medio ambiente y los recursos naturales lo justificaban como cabeza oficial del organismo de regulación del sector.
Miguel Ceara Hatton, como economista, estaba más justificado para ocupar la posición asignada. Más economista que político, Miguel también ha sido un asiduo interesado en los temas del medio ambiente. Caminante consumado. Ha recorrido miles de kilómetros a pie en sus caminatas por el territorio nacional y por los llamados “Caminos de Santiago” en España, Portugal y Francia.
El 6 de junio del pasado año, cuando se produjo la tragedia que puso fin a la vida de Orlando Jorge Mera, el presidente Luis Abinader se enteró de informaciones que no había recibido previamente, y quiso buscar a alguien con suficiente valentía y entereza para mejorar la administración del ministerio de Medio Ambiente. Provisionalmente designó a la vicepresidenta Raquel Peña para ocupar el cargo en lo que encontraba una persona idónea la posición.
Al parecer hubo personas escogidas por el presidente que se resistieron a ocupar la silla del malogrado ministro. Todo cuanto se decía era que los intereses cruzados eran muchos, que la presión sobre el incumbente era excesiva, que el territorio nacional bajo su responsabilidad estaba siendo azotado por los depredadores, que el personal directivo medio era maleable, que los militares responsables de proteger el medio ambiente tenían negocios, y que ocupar el cargo del ministro representaba un riesgo.
Uno de los más confiables, de los más fieles, de los más comprometidos con la gestión del presidente Abinader, y que desempeñaba muy bien sus funciones en el ministerio de Economía, Desarrollo y Planificación era Miguel Ceara Hatton. Quien tampoco quiso, porque dudó dejar lo que manejaba con pericia para ocuparse de una posición tan complicada. La decisión del presidente fue combinar disponiendo que una persona del equipo de Ceara Hatton continuara en Economía, Pavel Isa Contreras, y que Ceara asumiera la cartera de Medio Ambiente, con el encargo de corregir cuantas distorsiones encontrara.
Miguel Ceara Hatton ha cumplido con su deber. El PRM criticó con dureza las “nominillas” implantadas por la administración del PLD y que se hicieron famosas en todos los ministerios, abultando nóminas, inflando el gasto de personal y distorsionando la función pública con el clientelismo y el patrimonialismo, que debían ser extirpados del Estado.
Miguel Ceara Hatton encontró distorsiones y las corrigió, y eso es lo que expresó en una entrevista en televisión. Dijo de una nómina de 1.5 millones de pesos asignadas a personal a cargo de un periodista, pero que no eran empleados del ministerio. Es lo que haría cualquier ministro que tenga conocimiento de su responsabilidad y que recuerde el encargo que le hizo el presidente de la República al convencerlo de ir a ocupar la posición.
Hay los que piensan que Miguel Ceara Hatton puede ser sancionado, despedido, expulsado del gobierno o del PRM por cumplir con una responsabilidad ética. Tremendo error. Ceara Hatton ha sido responsable y ha cumplido con una ambición ancestral de la sociedad dominicana: El patrimonio público no puede ser pasto de los politiqueros.
Ceara Hatton ha cumplido con su responsabilidad como ciudadano, como perremeista y como ministro del gobierno del presidente Luis Abinader.