La Asociación de Fiscales Dominicanos (Fiscaldom) acaba de lanzar una proclama de reivindicación de sus derechos y reclamando mejores condiciones salariales y de vida para quienes desempeñan esa función dentro del Ministerio Público.
Dicen que quieren una justicia digna y respetuosa de la ley, y que las máximas autoridades del Ministerio Público respondan sus peticiones de garantizar financiamiento adecuado para ese departamento gubernamental, que supuestamente no ha tenido respuestas ante sus reiteradas peticiones.
Han dicho que “el sistema judicial que servimos está en crisis debido a la insuficiencia presupuestaria, el incumplimiento reiterado de la Ley 133-11, respecto a la carrera y su correcto funcionamiento, ascensos, formación especial, Plan de Pensiones y Jubilaciones digno, así como otras prerrogativas de derechos adquiridos, la sentencia del Tribunal Administrativo 030-02-2021-SSEN-00476, y las resoluciones del Consejo Superior del Ministerio Público (CSMP), sobre incentivos, ascensos y concursos, han debilitado nuestra capacidad para garantizar justicia digna, rápida y eficiente”.
Han dicho los fiscales organizados en Fiscaldom que “tomaremos medidas que garanticen el acceso a justicia de la ciudadanía durante esta jornada de paro, no dejaremos de lado los casos con plazos fatales, ni aquellos que afecten gravemente los derechos de las personas, ni víctimas de violencia. Nuestro compromiso con la sociedad sigue firme, pero no descansaremos hasta que nuestras legítimas demandas sean escuchadas y resueltas”.
Están organizando un paro contra la gestión más diáfana y responsable que ha tenido el Ministerio Público en toda su historia. Algunos de estos fiscales fueron favorecidos, y de hecho defendieron abiertamente, al pasado Procurador General de la República, en contraprestación de servicios y gratuidades.
La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) ha dicho que el momento es oportuno para consensuar un plan en favor de quienes ejercen las funciones de fiscales. El paro de los fiscales no es inocente, es reivindicativo y al mismo tiempo político y está relacionado con la persecución penal emprendida por el Ministerio Público contra pasadas autoridades. Finjus ha dicho que el consenso “debe dotarse de una base económica, social y reglamentaria que sea funcional a las exigencias del presente, al tiempo que permita reforzar la actividad de persecución y formulación del Órgano en respeto a la Constitución y las leyes”.
Claro, Finjus dice no compartir para paralización de labores de los fiscales, y les exhorta al diálogo.
Los miembros de Fiscaldom reclaman lo siguiente:
– Ascensos para procuradores fiscales y fiscalizadores.
– Concursos para titularidades de fiscalías, cortes y especializadas vencidas.
– Revisión salarial para igualar condiciones con el Poder Judicial.
– Puesta en marcha de un plan de retiro, pensiones y jubilaciones.
– Incorporación de beneficios marginales establecidos en la Ley 133-11.
– Creación de programas de desarrollo profesional y personal para los miembros del Ministerio Público.
Se trata de invisibilizar lo que Miriam Germán y el actual Ministerio Público han realizado en favor de los fiscales. Muchas de ellos designados con concursos amañados por el anterior procurador general, quien sigue teniendo influencia en ese personal.
Con Miriam Germán Brito los fiscales han tenido el respeto que jamás tuvieron en gestiones anteriores. Aún reconociendo sus antecedentes y vocación de servir a un mandato finalizado con la entrada de un gobierno diferente, la procuradora Germán Brito y su equipo han facilitado lo siguiente a los fiscales:
Dos bonos
Un aumento salarial
Un incentivo de combustible
200 millones para iniciar el Plan de Retiro, Pensiones y Jubilaciones. Al mismo tiempo Miriam Germán Brito designó una comisión integrada por fiscales y técnicos para diseñar y aprobar el Plan, cosa que no se hace de la noche a la mañana.
Es cierto que el Ministerio Público tiene necesidades, pero es falso que Miriam Germán Brito no haya hecho nada por los fiscales. Además, Miriam Germán abrió una mesa de diálogo con los fiscales, y ahora anuncian que se van a una paralización de actividades que afecta especialmente a los más pobres, que son los que tienen en marcha procesos en todo el territorio nacional. El 95 por ciento de los usuarios del sistema judicial, en particular la justicia penal, son con personas muy pobres.
Este martes el diálogo convocado por Miriam Germán incluye al Consejo Superior del Ministerio Público. De modo que el paro de este martes es una irracionalidad extrema, una forma de hacer daño a la imagen de la procuradora general de la República.
El paro que lanza Fiscaldom va directamente en contra de las víctimas ¿y por qué no? de los imputados que no tienen una decisión oportuna. Los paros de fiscales serán en contra de los abogados, muchos de ellos que van ajustados a un modelo en que no se cobra si no se sube a audiencia.
Este paro de fiscales va también contra de víctimas que requieren atención urgente, como violencia de género, violencia doméstica y violencia sexual.
La paralización convocada para este martes por los miembros de Fiscaldom es una barbaridad reivindicativa, sin razones válidas ni justas, y una forma de colocar manchas sobre la gestión de Miriam Germán Brito al frente del Ministerio Público, antes de que se vaya.