Satisface que varias entidades oficiales, que tienen la responsabilidad de ofrecer asistencia y apoyo a la niñez y la adolescencia, aboguen por la educación sexual en las escuelas.
Acaban de hacer la petición el Gabinete de Niñez y Adolescencia (Gana) y el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani). Y tienen toda la razón en hacer la solicitud y en pedir que sean acciones “inmediatas” y “contundentes”.
Claro, la decisión es del ministerio de Educación, y del señor ministro Àngel Hernández, quien ya decidió eliminar una ordenanza que establecía la educación en equidad de género, algo justo y necesario, porque eso era una sobreabundancia en el ordenamiento jurídico del ministerio bajo su dirección.
Para las dos entidades que trabajan con protección y cuidado de jóvenes y adolescentes, la educación sexual integral debe ayudar a prevenir los embarazos en adolescentes y orientar a los jóvenes y especialmente a las jóvenes a prevenir situaciones que pudieran traer consecuencias nefastas para su futuro.
Gana y Conani aseguran que las cifras sobre embarazo en adolescentes, uniones tempranas, violencia sexual y violencia social en las escuelas, dadas a conocer por el ministerio de Educación, urgen a encarar estos problemas con acciones "inmediatas" y “contundentes".
En este gobierno socialdemócrata del presidente Luis Abinader es un tema que debió tratarse y decidirse al inicio del gobierno, porque la educación sexual es uno de los postulados de ese partido de gobierno, y porque Milagros Ortiz Bosch, cuando fue vicepresidenta del país y ministra de Educación, en el período 2000-2004, estableció la educación sexual integral como parte del currículo educativo oficial.
El Gabinete de la Niñez y Adolescencia es presidido por la Primera Dama, sobre quien no puede caber ninguna duda de su concepción cristiana y de su devoción frecuente. Pero los embarazos en las adolescentes no se detienen con las oraciones ni las plegarias al Señor. Todo el mundo lo sabe.
Gana y Conani han dicho:
"Sabemos por los reiterados informes estadísticos, que la República Dominicana ocupa uno de los primeros lugares en embarazos en adolescentes en América Latina y el Caribe. Estas cifras del Minerd vienen a reconfirmar que estamos frente a un problema social de envergadura que demanda, tanto de las instituciones del Estado como de la sociedad, un compromiso serio con el enfrentamiento de sus causas”.
Qué bueno que se han expresado con inteligencia, racionalidad y valentía.
Lo que hay que esperar es que no se inventen ahora que -como consecuencia de estas peticiones- han comenzado a aparecer preservativos en los zafacones y en los baños de las escuelas, como ya han fabricado en ocasiones anteriores.