Simpatizamos con el Patronato de Ayuda a Casos de Mujeres Maltratadas (PACAM), que dirige la sicóloga Soraya Lara, y nos complace que una organización como esa haya celebrado sus primeros 20 años.
El acto de celebración fue una demostración de solidaridad, reconocimientos y buenas noticias para lo que viene en trabajo, organización, avances y en consolidación de un esfuerzo solidario y profesional de calidad superior.
Lo que el PACAM ha ofrecido a sus pacientes y clientes es apoyo emocional, asistencia a personas y a familias en circunstancias difíciles, y muy especialmente en los casos de violencia de género y maltrato a mujeres por parte de sus parejas y otras personas relacionadas.
Fundado en 2003 y reconocido ese mismo año mediante el decreto Presidencial No.993-03, esta entidad ha ofrecido servicios y apoyo a más de 200 mil personas, una media de 10,000 personas al año. Y el reconocimiento es principalmente para las fundadoras de la organización y para el personal que ha dado seguimiento y aportado sostenibilidad a un servicio precariamente ofrecido en el país hasta entonces.
La anoche de la celebración, el pasado martes, fue propicia para otorgar un reconocimiento especial a la cofundadora y primera presidenta del patronato, actualmente embajadora plenipotenciaria de la República Dominicana en Francia, señora Rosa Hernández de Grullón.
Soraya Lara, cofundadora y presidenta del PACAM, dijo que luego del recorrido de 20 años de vida institucional, “nuestro compromiso se reafirma y les aseguramos que continuaremos con firmeza en la tarea de hacer públicamente visible el flagelo de la violencia y de concienciar a todos los sectores posible, con miras a crear una cultura de paz, buen trato e igualdad en los hogares dominicanos”.
Auguramos nuevos éxitos y muchos años de trabajo del PACAM y que todo cuanto haga impacte positivamente en la redacción de la violencia de género y el maltrato y los asesinatos de mujeres en la República Dominicana. Es una tarea ardua, en la que debe involucrarse el Estado, por vía de muchas de sus instituciones (Procuraduría, Policía, Salud, Educación, Ministerio de la Mujer, entre otras) y también debe participar la sociedad dominicana a través de sus instancias académicas, empresariales, comunitarias, eclesiales. La epidemia de la violencia de género está truncando muchas vidas, y hay que buscar las formas de reducirla y detenerla. No nos queda de otra, y el PCAM está trabajando en esa dirección.