Dos fallecimientos nos enlutan esta semana. El martes falleció en Santiago doña Librada Alonzo Guzmán, viuda Pérez, una amiga sincera y querida, que dio apoyo y estímulo a Acento desde el momento de su nacimiento, y nos albergaba en su residencia cuando visitábamos Santiago para reuniones con Sara Pérez, su hija, una de las mejores plumas periodísticas que ha tenido República Dominicana.
Doña Librada recibirá cristiana sepultura este jueves, en Santiago, y siempre la recordaremos como la madre amorosa y cuidadora, cultivadora de un exquisito jardín, atenta siempre a los soliloquios de Sara, su adorada hija, siempre crítica y creativa al abordar los temas políticos, culturales, periodísticos, como a los asuntos familiares. Estamos con Sara y le expresamos nuestra solidaridad y gratitud en este difícil momento en que despide a doña Librada, su madre y la madre de muchos amigos y amigas, que siempre estamos tras los viajes de Sara.
El otro triste acontecimiento nos llegó temprano, en la mañana del miércoles, con la información de que el periodista Octavio Estrella, colaborador de Acento, en el trayecto de la capital a Bonao, en la zona de La Cumbre, el automóvil en que iba fue arrollado por una patana que transitaba a velocidad temeraria.
Octavio falleció en el Hospital Pedro Emilio De Marchena de Bonao, y la despedida ha iniciado este miércoles entre 6 y 9 de la noche en la Funeraria Blandino de la avenida Abraham Lincoln, y continuará este jueves entre las 9 de la mañana y las 2 de la tarde, para recibir sepultura a las 3 de la tarde.
Octavio trabajó muchos años en el Departamento de Comunicación de la Asociación Pro Bienestar de la Familia (Profamilia), también laboró en varios medios de comunicación como redactor y corrector de estilo. Era muy cuidadoso con los textos que se ponían en sus manos. Escribía folletos de educación popular, en salud y sobre temas políticos. Su hija Atabeira Estrella es una reconocida periodista, y Carmen, la esposa de Octavio, es una docente en la UASD, a quien expresamos, junto a toda su familia, nuestro más sentido pésame.
Octavio fue miembro de la dirección del Partido de los Trabajadores Dominicanos (PTD), transformado en Fuerza del Pueblo. Era dirigente de esta organización que encabeza el doctor Leonel Fernández. El país ha perdido un militante y político activista y honrado, de gran vocación democrática, y los sectores populares han perdido un aliado importante, que reforzó el trabajo formativo y corporativo de los grupos informales.
La muerte acechó y alcanzó a Octavio cuando se dirigía a Piedra Blanca, municipio de la provincia Monseñor Nouel, a ofrecer una charla sobre periodismo y cooperativismo. Apostamos por la recuperación de sus compañeros de viaje, que resultaron lesionados por el accidente. Recomendamos que se investigue este atropello y que los propietarios y el conductor de la patana que arroyó el vehículo en que iba Octavio Estrella cumplan con las condenas civiles y penales que correspondan.
Nuestro acompañamiento a estas dos familias de periodistas, tanto por el deceso de doña Librada, la madre de Sara Pérez, como por la trágica muerte de Octavio, un periodista de gran vocación profesional y búsqueda de la justicia social.
Que ambos tengan descanso eterno y sean recordados por las buenas acciones que emprendieron y el bien que hicieron. Así los recordaremos en Acento.