Wall Street cerró este martes su primera sesión del año en terreno mixto y el índice Nasdaq, donde cotizan las grandes tecnológicas, registró su peor jornada desde octubre, después de que la firma Barclays rebajara su calificación de Apple, citando las malas ventas del iPhone 15 en China.
El Nasdaq cerró la sesión con una bajada del 1,63 %, hasta los 14.766 puntos, mientras que el Dow Jones de Industriales creció un leve 0,07 %, para llegar a 37.715 puntos.
Al cierre de las operaciones en la Bolsa de Nueva York, el selectivo S&P 500 bajó un 0,57 %, hasta 4.743 unidades.
En 2023, Wall Street acumuló varios cierres históricos, con sus principales indicadores al alza, impulsados por el enfriamiento de la inflación y el pronóstico de la Reserva Federal de recortar los tipos de interés este año.
Mientras que las acciones tecnológicas lideraron el avance de la bolsa en 2023, en su primera sesión del año las grandes empresas del sector cerraron a la baja, con Apple cayendo casi un 4 % después de que la compañía de servicios financieros Barclays expresara su preocupación por un período prolongado de resultados débiles en la empresa.
Tim Long, analista de Barclays, señaló en una nota recogida por la cadena CNBC que el iPhone 15 está teniendo unas ventas "mediocres", especialmente en China, y pronosticó unas ventas igualmente débiles del iPhone 16.
Intel, el gigante de los chips, cerró la jornada con una caída de casi el 5 %.
Por sectores, las mayores subidas fueron para el sanitario (1,76 %) y el de servicios públicos (1,38 %). Las mayores caídas las registró el sector de la tecnología, que se dejó un 2,58 %.
Entre los 30 valores del Dow Jones destacaron las caídas de Intel (-4,88 %), Apple (-3,58 %) y Boeing (-3,41 %). Mientras, las mayores subidas fueron para Merck (3,87 %) y Amgen (3,25 %).
Por otro lado, el bono del Tesoro estadounidense a diez años, de referencia, subió hasta el 3,937 %, y los futuros del oro estadounidense cayeron y alcanzaron 2.068 dólares la onza.
En otros mercados, el petróleo de Texas bajó hasta 70,38 dólares el barril, y al cierre de la Bolsa, el dólar ganaba terreno frente al euro, con un cambio de 1,0942.