Uno de cada cuatro jóvenes de entre 18 y 24 años en América Latina no estudia ni trabaja de forma remunerada, según un estudio sobre empleo y juventud en América Latina presentado este lunes en un evento en el Parlamento Europeo (PE) de Bruselas.
El estudio, realizado por la organización Ayuda en Acción y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), arrojó otras conclusiones como que más del 70 % de las mujeres en América Latina se dedican exclusivamente al cuidado laboral.
"Los salarios de los jóvenes son mucho más bajos que los de los adultos, el 20 % reciben ingresos más bajos que los de la línea de la pobreza. No porque no tengan familias, las tienen o quieren formarlas pero no pueden", indicó el oficial de Asuntos Económicos, División de Desarrollo Social de CEPAL, Andrés Espejo.
Además, explicó que Latinoamérica tiene actualmente una de las generaciones de jóvenes más formadas de los últimos años, aunque las brechas en las tasas de finalización de educación se amplifican en niveles superiores.
El estudio señaló que más de seis de cada diez jóvenes ocupados podrían concentrarse en un futuro en el sector de servicios, "cuya calidad está sujeta a la disponibilidad de puestos laborales".
También apuntó a altas tasas de desocupación e informalidad juvenil si la demanda de trabajo no aumenta a la misma velocidad que la oferta de trabajadores.
Desde CEPAL, Espejo quiso subrayar que estos escenarios poco optimistas "no son inevitables" y que "es momento de actuar".
"Es fundamental implementar políticas públicas que impulsen la productividad y el crecimiento económico. La necesidad de mejora las condiciones laborales juveniles enfrenta desafíos, como en el sector servicios", apuntó Espejo.
El director del Patronato de Ayuda en Acción, Rafael De Dezcallar, expresó su convencimiento sobre la importancia de los esfuerzos dirigidos a la juventud, empleo y acción para poder plantear "un cambio económico que sea sostenible".
En la reunión estuvieron presentes las eurodiputadas españolas Rosa Estarás, del grupo del Partido Popular Europeo, y Leire Pajín, del grupo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas en el Parlamento Europeo.
"Somos dos regiones – Europa y América Latina – que comparten una forma de ver el mundo, que luchan contra la pobreza, la desigualdad y la revolución ecológica. Esto no es una cuestión menor en un mundo cuyos líderes no van por ese camino. Esta alianza será absolutamente necesaria para objetivos como la igualdad laboral o digital", aseguró Pajín.
Estarás expresó que debe haber una cooperación "eficaz" entre Latinoamérica y la Unión Europea (UE) "en tiempos de cambios", enfocada en reformas en el sistema educativo y mejoras en el mercado laboral con "empleos dignos y bien remunerados".
Por su parte, la directora de la organización para el desarrollo humanitario Alliance2015, Antonia Potter-Prentice, subrayó a través de una videoconferencia la importancia de la perspectiva de género en estos estudios y la necesidad de reformular los sistemas de educación y trabajo "en materia de calidad y enfocarlos al desarrollo de habilidades".