La economía de EE. UU. se contrajo en el período abril-junio 2022 en 0.9%, marcando el segundo trimestre consecutivo de crecimiento económico negativo y mostrando una fuerte señal de recesión.

Cabe recordar que durante el primer trimestre del año la economía de EE. UU. se contrajo en 1.6%. Dos trimestres consecutivos de crecimiento económico negativo general se consideran una fuerte señal de recesión económica. El PIB es la medida más amplia de una economía y mide la cantidad total de bienes y servicios que produce un país durante un año.

Paralelamente, la Reserva Federal (FED) en un esfuerzo de controlar la inflación galopante de los últimos cuarenta años, que, al mes de junio del 2022, se situó en 9.1%, este miércoles subió su tasa objetivo de fondos federales entre un rango de 2.25% y 2.50%, un incremento de 75 puntos básicos, con relación al mes de junio 2022.

Jerome Powell presidente de la FED ha señalado que “los indicadores recientes de gasto y producción se han suavizado, la creación de puestos de trabajo ha sido sólida en los últimos meses y la tasa de desempleo se ha mantenido baja. La inflación sigue siendo alta, lo que refleja los desequilibrios entre la oferta y la demanda relacionados con la pandemia, la subida de los precios de la energía y los alimentos, así como presiones de precios más amplias”

El punto más importante es que la economía de los Estados Unidos ha perdido fuerza rápidamente ante la alta inflación de cuatro décadas, el rápido aumento de los costos de los préstamos y un endurecimiento general de las condiciones financieras, se han combinado con la desaceleración del gastos de los hogares, menor inversión empresarial, menor inversión en vivienda, y menores gastos del gobierno, sumándose así, un déficit comercial más estrecho, que supone una caída de las importaciones y exportaciones, factores que alimentan los temores de una recesión para el tercer y cuarto trimestre del 2022.

Un indicador clave que sustentan los temores de una recesión es la demanda subyacente que excluye los componentes de comercio e inventarios (las ventas finales ajustadas por inflación a compradores nacionales) cayó a un ritmo del 0,3 % en el segundo trimestre en comparación con una ganancia del 2 % en el período anterior.

La inflación ha socavado el poder adquisitivo de los estadounidenses y la política monetaria más estricta de la FED ha debilitado los sectores sensibles a las tasas de interés, como la vivienda.

Si bien la regla general común para las recesiones es dos caídas trimestrales consecutivas del PIB, la determinación oficial de los fines y comienzos de los ciclos económicos la realiza un grupo de académicos de la Oficina Nacional de Investigación Económica (The National Bureau of Economic Research)

En el plano de interno de la República Dominicana, en publicaciones anteriores desde la columna de Tu Consultorio Financiero, ya habíamos pronosticado el aumento de la tasa de política monetaria de los Estados Unidos en nuestra publicación del 14 de julio del 2022, titulada “Sube inflación de los EEUU, la mayor economía del mundo será frenada”.

Ya está claro que estamos a la puerta de una recesión en la mayor economía del mundo, y veremos nuevamente aumento de tasas de interés de la política monetaria del Banco Central de la República Dominicana, a niveles superiores del 7.25% con la finalidad de mantener los diferenciales de tasas de interés entre ambos países y evitar así la fuga de capitales que pudieran poner en riesgo la estabilidad del tipo de cambio, lo cual exacerbaría los niveles internos de inflación.

El 16 de junio del 2022, en nuestro artículo titulado “Reserva Federal de EEUU sube su tasa de política monetaria ¿Cuál será su impacto en RD?”, señalábamos los posibles impactos que tendría el endurecimiento de la política monetaria de los Estados Unidos, combinado con una posible recesión económica, donde indicábamos que habrá una disminución sustancial en las remesas que envían los dominicanos a sus familiares; disminución de los turistas que nos visitan de los Estados Unidos, las exportaciones dominicanas hacia los Estados Unidos también se verán afectadas; los costos de endeudamiento externo para el país serán más elevados; entre otros, todos combinados de alguna manera afectarían de forma negativa nuestra economía en su crecimiento, la generación de empleo, y en menores recaudaciones fiscales para el Gobierno.

A los fines de poder mitigar los posibles impactos negativos en nuestra economía, el Gobierno deberá mantener los subsidios a los combustibles, mantener estable los precios de la energía eléctrica, mantener la exención de impuestos a todos los productos básicos de la canasta familiar, continuar con los programas de asistencia hacia la población más vulnerable, apoyar la producción nacional, sobre todo a nuestros productores agrícolas.

Ahorrar los excedentes de los ingresos fiscales anunciados por las Direcciones General de Aduanas e Impuestos Internos. Evitar aumentar los niveles de deudas actuales que pudieran erosionar la capacidad de pago de nuestro país. Mejorar la calidad del gasto, evitando los gastos incensarios, como son los de publicidad y comunicación estratégica. Así como mantener, una coordinación entre la política fiscal y las medidas de política monetaria, estas últimas que de manera proactiva y asertiva se han tomado desde la Junta Monetaria, y el staff técnico del Banco Central.

Tu Consultorio Financiero es una columna desarrollada por Jesús Geraldo Martínez para Acento.com.do sobre finanzas personales, para orientar a las personas con conocimientos básicos en finanzas y economía a mejorar su entendimiento. Para consultar con el autor puede escribir al correo Jgmartinez20@icloud.com o seguir a @Jesusgeraldomartinez en Instagram.