El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este martes con una bajada del 1,17 %, hasta 79,32 dólares el barril, cuando las preocupaciones por los repuntes de casos de COVID-19 en China -principal importador de petróleo del mundo- cada vez preocupan más a los inversores.
A las 9.00 hora local (14.00 GMT), los contratos de futuros del WTI para entrega en febrero perdían 94 centavos de dólar con respecto al cierre de la jornada previa.
La actividad de las fábricas de China se contrajo en diciembre debido a que el aumento de las infecciones por el coronavirus interrumpió la producción y redujo la demanda después de que China eliminara una buena parte de las restricciones que había impuesto desde el principio de la pandemia.
Además, los inversores tienen los ojos puestos en la reunión del miércoles de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos.
El banco central subió los tipos en 50 puntos básicos en diciembre tras cuatro subidas consecutivas de 75 puntos básicos cada una, incrementando así el temor a una recesión este año.
"Es probable que el miedo a una recesión domine el mercado del petróleo a corto y mediano plazo", detalla hoy Tom Essaye en el informe de The Sevens Report.