Para el 31 de diciembre de este 2024, se habrá completado la instalación de 1,500 megavatios nuevos al sistema eléctrico nacional. Así lo destacó el superintendente de Electricidad, Andrés Astacio Polanco.
Destacó que para los próximos cinco años, se prevé la puesta en servicio de 1,900 megavatios adicionales. En lo que concierne a la transmisión, se ha concretado la ampliación de las redes de 345 kilovoltios hacia el norte y sur del país.
El superintendente de Electricidad, abordó los temas de innovación, ahorro de energía y protección al consumidor y refirió el esfuerzo de la actual administración del Estado para aumentar la capacidad de generación eléctrica y el suministro a los usuarios.
Desde la Dirección de Protección al Consumidor del Servicio Eléctrico, sólo en 2022 procesamos 38,101 reclamaciones, de las cuales resultaron procedentes 22,901 (el 60.10%), lo que representó la recuperación de RD$ 26,155,222.94 para los reclamantes.
Astacio explicó que el verano presenta retos importantes para las empresas y los consumidores, quienes deben enfrentar un aumento de la demanda provocada por un mayor consumo en hogares y empresas, y este cambio exige un ahorro de energía para no sobrecargar el sistema y evitar aumentos en la factura.
Explicó que “el gobierno ha hecho inversiones para ampliar la capacidad del sistema eléctrico nacional. En 2019, los dominicanos recibían 17 horas de servicio al día, ahora reciben 23.2 horas”.
Desde mediados del 2022, aseguró el superintendente, la actual administración de la SIE ha emprendido acciones, “incluyendo la aprobación de regulaciones necesarias de fondo y mejoras continuas para asegurar la prestación de un servicio eléctrico de calidad, vigilando de la mejor manera posible, las actividades de generación, transmisión, distribución y comercialización de electricidad”.
Citó el caso del Reglamento de Seguridad Cibernética y de la Información para el Subsector Eléctrico en República Dominicana, para “garantizar la protección de la información digital en el subsector eléctrico dominicano, una materia que cada vez se hace más sensible y delicada en todo el mundo para las administraciones públicas y las ciudadanías”.