El salario promedio real y la productividad laboral no se han recuperado, siendo los trabajadores informales los que han encabezado la recuperación del empleo luego de la pandemia.

El debilitamiento de los sueldos aún  “es preocupante” considerando el aumento en el costo de alimentos, bebidas no alcohólicas y transporte.

Así lo plantea el análisis realizado por el Instituto de Investigaciones Socioeconómicas (INISE) de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Autónoma Santo Domingo (UASD), “La economía dominicana: desaceleración del crecimiento económico y pérdida del poder de compra de los salarios”.

De acuerdo con el análisis la productividad laboral no ha recuperado sus niveles previos a la pandemia debido a la importante caída de la cantidad de horas promedio trabajadas a pesar del crecimiento progresivo de la cantidad de ocupados.

El mercado laboral dominicano se encuentra en el sendero hacia la recuperación del empleo, pero con matices. El documento explica que a pesar de que el número total de ocupados se ha recuperado a niveles cercanos al periodo pre-pandemia, el empleo informal ha incrementado su proporción en relación al total de ocupados (pasando del 55.4 % en el cuarto trimestre de 2019 al 57.9 % en el segundo trimestre de 2022), lo que implicaría un deterioro, en promedio, de las condiciones laborales de los trabajadores en el país.

“El empleo informal ha servido como principal colchón de recuperación de los empleos tras el periodo de recesión económica”, plantea

Pérdida de poder de compra

El análisis encabezado por el economista y decano de  la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, Antonio Ciriaco Cruz, sostiene que la ausencia de aumento de salario real en relación con el aumento en la productividad del trabajo ha sido una constante en la dinámica económica del mercado laboral dominicano desde el año 2000 .

"Al tomar como año de referencia el 2015 , el nivel general de precios ha aumentado con una caída y reciente recuperación de los salarios nominales a la situación previa a la Pandemia. Por tanto, ha habido una caída importante en los salarios reales que aún no recuperan su poder de compra respecto al año 2015″, indica

Explica que cuando se desglosan la caída del salario real por los distintos grupos de artículos respecto a alimentos y bebidas no alcohólicas, así como el transporte (que incluye también los precios de los combustibles), se acentúa más el aumento de la inflación y por tanto la pérdida del poder de compra de los salarios reales para dichos bienes y servicios.

Por tanto, sostiene que en aquellos bienes donde los quintiles de menores ingresos concentran su gasto principalmente, se han visto más afectados debido a los aumentos de los niveles inflacionarios y la pérdida del poder de compra de los salarios reales.

Inflación

El primer semestre de 2022 ha sido positivo para la economía de la República Dominicana, según el informe, pero sostiene que hay diversas "señales" que apuntan a riesgos y eventos coyunturales que podrían afectar la senda de crecimiento económico del país.

Considera que el aumento de la tasa de política monetaria del Banco Central de la República Dominicana (BCRD) y el aumento de los tipos de interés de la Reserva Federal de los Estados Unidos, podría agudizar la desaceleración del crecimiento

"La inflación experimentada a partir de 2021 continúa siendo persistente, superando nuevamente el rango meta de inflación establecido por el Banco Central. Este panorama inflacionario va en consonancia con la tendencia global, donde mantener la estabilidad de precios en torno al rango meta ha sido uno de los principales retos de las economías de la región latinoamericana, las economías emergentes y las economías desarrolladas. Cabe resaltar que este panorama inflacionario cuenta con elementos vinculados a los aumentos en los costes de “commodities” internacionales producto del conflicto Rusia-Ucrania, sobre todo aquellos vinculados a la energía", puntualiza

Considera que las progresivas subidas de las tasas de política monetaria en todas las economías, incluyendo la dominicana en el contexto de los altos niveles de inflación, han llevado a una desaceleración en el titubeante proceso de recuperación económica a nivel global.