Los negocios familiares de Centroamérica y República Dominicana necesitan adaptarse al nuevo mercado, más amigable con el medioambiente, igualitario e inclusivo, para captar la confianza de las nuevas generaciones y asegurar el futuro de la empresa, según un informe de PwC Interaméricas.
El documento indica que "Centroamérica y República Dominicana no escapan de esa tendencia global en cuanto al giro de los negocios familiares", pues "cuestiones como los criterios medioambientales, sociales y de gobierno (ESG, por sus siglas en inglés) y la diversidad, equidad e inclusión (DEI) se han convertido en pruebas de fuego para medir la credibilidad de las compañías".
En el informe, tras evaluar la participación de las nuevas generaciones (Millenial y Z) en el negocio familiar, se observó que "algunas empresas ya cuentan con miembros involucrados ya sea como accionistas, en el consejo de administración o en posiciones directivas".
Y destaca que "no todas las empresas cuentan con miembros de la siguiente generación participando en el negocio", pues podría ser "que las nuevas generaciones han mostrado un especial interés en todos los aspectos relacionados a ESG, lo que no se alinea completamente con las estrategias de las generaciones anteriores".
En comparación con otros países, las empresas familiares en Centroamérica y República Dominicana "no tienen un modelo de gobierno corporativo completamente estructurado". La "gobernabilidad ayuda a administrar de manera eficaz y eficiente la empresa familiar, al mismo tiempo que vigila el crecimiento estratégico", según el comunicado.
El 77 % de las empresas familiares prevé crecer en los próximos dos años – y el 14 % confía en hacerlo "de forma rápida y agresiva"- mientras que el 51 % afirma que su principal prioridad es expandirse a nuevos mercados, de acuerdo con cifras globales del informe "Encuesta Mundial sobre la Empresa Familiar 2023″.
La encuesta también arroja que los empresarios familiares que participaron "no tienen a las cuestiones ESG entre sus principales prioridades", pues apenas el 15 % considera estar "muy avanzado" en cuanto a tener una estrategia ESG bien definida mientras que el 67 % afirma que presta poca o ninguna atención a esos criterios.
En tanto, el 19 % señala que minimizar el impacto de su empresa en el medioambiente es una prioridad y el 20 % asegura que reducir la huella de carbono de su compañía es una prioridad en los próximos dos años.
La encuesta fue realizada mediante 2.043 entrevistas a propietarios de empresas familiares, 256 de ellas en Latinoamérica, en 82 territorios de todo el mundo, entre el 20 de octubre de 2022 y el 22 de enero de 2023.
El informe destaca que "la confianza es tangible y se puede construir de forma consistente", pero "para que las empresas familiares protejan esa ventaja competitiva será necesario que se transformen; algo que muchos líderes empresariales ya están empezando a reconocer".
Así, el documento de PwC Interaméricas aconseja tres claves para adaptarse al nuevo mercado: "lo primero y más importante entre estas acciones es establecer una comunicación bidireccional con los grupos de interés", seguido de "generar confianza a través de la transparencia" y, por último, la empresa familiar debe hacer pública su postura sobre los problemas sociales.