Las zonas francas dominicanas han registrado un desempeño positivo de forma ininterrumpida, lo que evidencia que se han convertido en un sector clave para la recuperación y la estabilidad macroeconómica de República Dominicana.
Así lo consideró Pedro Cuba, director general en el país de la empresa Broadway Support Services, quien destacó la importancia de contar con empleos que mejoren la calidad de vida de los dominicanos y abogó para que se continúe apostando por la tecnificación de la mano de obra del sector.
De acuerdo al más reciente estudio de impacto realizado por Analytica, en términos de exportaciones de bienes, las zonas francas alcanzaron los US$ 7,180 millones durante el 2021, con un crecimiento de 15% respecto al 2019 y un 22 % respecto al 2020.
Mientras, la inversión total acumulada en las zonas francas totalizó US$ 5,903.1 millones en 2021, un 14% más que el año anterior. Un comportamiento similar registraron las exportaciones de este sector que en 2021 se situaron por primera vez en US$ 7,179.6 millones, un 22 % más que el 2020, según datos del Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes (MICM).
Y para este año, según un comunicado, el panorama para las zonas francas y el país se vislumbra muy favorable.
"Según el estudio, si mantiene la tendencia registrada durante el primer semestre de 2022, se espera que las exportaciones totales de bienes y servicios de zonas francas superen los US$ 10,000 millones, con una generación de divisas netas cercana a los US$ 1,700 millones y con un crecimiento del PIB de un 9.3 %", se indicó a través del documento.
Cuba, quien cuenta con más de 18 años de experiencia en la industria BPO (Business Process Outsourcing), entiende que el auge que está registrando esta industria se debe a la privilegiada ubicación geográfica de República Dominicana, su seguridad jurídica, así como también los incentivos y las facilidades que ofrece el Estado dominicano para las empresas extranjeras.
El experto resalta como un indicador primordial para el establecimiento de nuevas empresas del sector: el talento humano local que, según afirma, cuenta con un alto nivel de tecnificación.
“Lo más atractivo para una empresa de outsourcing que busca establecerse en el país es el talento humano que, específicamente en las zonas francas, cuenta con un personal muy preparado y de alto nivel. Es la inversión más segura”, dijo.
Precisa que, para impulsar la competitividad de las zonas francas, el país precisa continuar trabajando en dos ejes clave: aumentar la tecnificación y el nivel de inglés de los trabajadores de esta industria.
A su juicio, contar con una creciente mano de obra bilingüe incentiva a un mayor número de empresas extranjeras a establecerse en República Dominicana, lo que, en consecuencia, generará más inversión y divisas.
En ese sentido, Cuba considera que, aunque el Estado ha hecho un buen trabajo en la formación de nuevos talentos a través del Programa de Inglés por Inmersión, hace falta ampliar las plazas formativas para que más dominicanos puedan aprender este idioma, que resulta fundamental para acceder a empleos dignos de forma inmediata y mejorar la calidad de vida.
“Hay muchas personas que desean formarse con el Programa Inglés de Inmersión y, por alguna razón, no pueden aprovechar esta oportunidad. Una propuesta que se puede tomar en cuenta es ampliar el margen de edad para que los aspirantes puedan inscribirse en este plan de estudios”, destaca.